@RosmeriAlfaro
El vicepresidente de los Estados Unidos Joe Biden y el Presidente Salvador Sánchez Cerén conversaron ayer, de cómo profundizar la cooperación bilateral y regional para reducir la migración irregular de centroamericanos a los Estados Unidos.
Biden, a través de una llamada telefónica, elogió el liderazgo de El Salvador en sus avances en el Plan de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte de Centroamérica, incluyendo la intensificación de las inversiones en seguridad, prosperidad y establecimiento del Estado de Derecho.
“Los dos líderes estuvieron de acuerdo en continuar trabajando juntos en los siguientes meses con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y otros socios regionales para avanzar en reformas de la política fiscal, estimular el crecimiento económico, mejorar la administración pública e incrementar la seguridad para construir un mejor futuro para el pueblo centroamericano”, aseguró la Casa Blanca, a través de un comunicado.
De acuerdo con el canciller de la República, Hugo Martínez, la llamada fue en preparación a la reunión que tendrán el 23 de septiembre en Washington, donde también estará presente el presidente de Honduras Juan Orlando Hernández, Jimmy Morales, presidente de Guatemala, y el presidente del BID, Luis Alberto Moreno.
El Plan regional de los gobiernos de El Salvador, Guatemala y Honduras pretende generar condiciones para frenar el fenómeno migratorio y la crisis humanitaria que ocasionó el incremento reciente en el flujo de niñas y niños migrantes no acompañados hacia los Estados Unidos.
Para esto, los tres países acordaron medidas que pretenden transformar la calidad de vida de los ciudadanos y generen arraigo, por medio de cuatro líneas estratégicas que derivan en un cambio estructural de los tres países que conforman la Alianza: dinamizar el sector productivo, desarrollar el capital humano, mejorar la seguridad ciudadana y acceso a la justicia y fortalecer las instituciones.
“Hay una meta específica que se refiere a la transparencia y la lucha contra la corrupción y mejor prueba de que las instituciones están funcionando contra la corrupción no puede haber enfrente con tanto caso que se está ventilando últimamente”, dijo el canciller Martínez.
“El país ha avanzado en mantener la estabilidad macroeconómica y financiera, aumentado la recaudación tributaria, fortaleciendo el gasto e inversión social, generando incentivos y estabilidad jurídica para las inversiones e impulsando los consensos necesarios para el desarrollo de la estrategia de seguridad pública y espacios de diálogo para articular acciones entre el Estado y los diferentes sectores sociales como parte del proceso de gobernabilidad y consolidación democrática», afirma el gobierno de El Salvador.
El Plan regional de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte está siendo impulsado con el respaldo del Gobierno de Estados Unidos y el apoyo técnico del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).