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155 aforismos de escritores salvadoreños

Wilfredo Arriola

Poeta y escritor, 

Si tuviera que elegir entre la sinceridad y la honestidad, ¿Qué eligiera? Es la pregunta que me hago cada vez que leo poemas de autores salvadoreños. Quiero ser sincero conmigo mismo y destacar la esencia en cada uno de sus textos. Hay pasajes, verdades, verdades a medias, puñaladas, hermosas mentiras, cuestionamientos que he querido destacar en esta selección. En definitiva, falta mucho más, pero todo inicio hace menos corto el camino. Me he emocionado al sacar de cada uno de los abajo destacados un poco de ellos, una mirada o tomarlo como cuando uno camina por la calle y se encuentra a un escritor y esos escasos minutos sirven para que te diga algo que se quedará contigo para siempre. La ficticia palmada que sucede, cuando uno lee un escrito, —te detienes por un momento— cierras el libro y miras a cualquier parte y a tono de confesión mencionas lo que te hace sacar la admiración por lo que tienes en tus manos. De hecho, los poetas, escritores sirven para eso, para que con sus palabras te recreen un momento de tu vida dicho a su forma y manera. Después diría un escritor al cual reconozco en silencio, sirven para muy poco, pero cuando sirven, sirven de manera absoluta.

1.

Mi libertad renuncia a su desierto.

Lilian Serpas-Vivo en lo abierto

2.

Me envías un mensaje

con esa golondrina

que equivoco la tarde.

Lilian Serpas– Microgramos de niebla

3.

No sé cómo decirlo.

Estoy vacío.

Me quema una palabra que no encuentra

Su rumbo hacia los labios.

Hugo lindo– XX

4.

La ansiedad no veía

lo que la paz

sabia.

Hugo Lindo– Nada

5.

Estoy tan solo. Y el invierno es crudo…

Y errante va mi corazón desnudo

igual que un perro que perdió su dueño.

Raúl Contreras– Atardecer

6.

Porque el minuto sabe lo que pide

y por qué pide, adelanté la hora.

Raúl Contreras– Circulo

7.

Pobre es la fe si la señal se ignora.

Lidia Nogales– Senda de luz

8.

La noche se lleva al mundo…

¿Adónde lo va a encerrar?

Lidia Nogales– El tiempo perdido

9.

Muérdeme y diles que no es pecado el mar en la boca.

André Cruchaga– Confesiones

10.

Cuando madura lo irremediable, es desmedida mi propia miseria.

André Cruchaga– Laberinto

11.

No importa la caída cuando el fondo es ficción.

Claudia Meyer– Soledad se respira al borde del vacío

12.

El laberinto es otro dios que no nos ama.

Claudia Meyer– El laberinto fue un sueño, debió serlo en sus raíces

13.

Se llama ausencia. Antes fue mi mujer, y un día dejó de amarme.

Krisma Mancía– Es primavera y no puedo verla dijo el ciego

14.

En vez de darme una explicación me regalaste una flor marchita.

Krisma Mancía– Corre, corre pez de fuego

15.

Dirán que no forjé enemigos,

salvo aquellos,

producto de la guerra.

Roberto Laínez-Presuntuoso que es uno

16.

Lejos de la razón, sin ningún dolo,

dejando que la tarde se consuma;

vaga sin rumbo el caballero, solo.

Roberto Laínez-Desocupado lector IV

17.

Yo recuerdo una noche

y estoy tan lejos de mí mismo que aun me queda

una noche.

Ricardo Lindo-Lento poema de los mares

18.

No hay palabras ni ideas.

Sólo se siente el viento

contra el rostro y el pecho.

Ricardo Lindo-En plata y gris

19.

Las tragedias no son tan graves a menos que uno esté de rodillas.

Lauri García Dueñas– 18

20.

Por qué no inventas una religión que te exija el suicidio

y la oficializas.

Róger Guzmán– Tus ojos todas las sombras

21.

El dolor es como el bullicio de la televisión en la madrugada.

Rebeca Henríquez-Efecto Nocebo

22.

Debes ser inteligente. Tienes tan sólo dos opciones: la muerte o la vida.

Sin embargo, escogí el dolor.

Rebeca Henríquez-Efecto Nocebo

23.

No te he visto,

pero huelo sobre ti un pequeño mar de lágrimas.

Vladimir Amaya-Ella

24.

La sal no es la sal cuando no ha dolido.

Vladimir Amaya– Ella

25.

Estoy poblado de gritos

Entre el inmenso sol del mediodía.

Alfonso Velis Tobar-Estoy poblado de gritos

26.

Soy el espejo roto de mis sueños.

Alfonso Velis Tobar– ¡Si muriera mañana!

27.

Las estrellas no saben lo que esta noche alumbran.

Roxana Méndez-Condenación

28.

Su terrible silencio

ya se ha vuelto mi voz.

Roxana Méndez– Primera escena para un día terrible

29.

Las lágrimas tienen el tamaño de las calles

Tienen el tamaño de todas las plegarias.

Luis Borja-Ciudad IV

30.

Vivo en un país donde la bala sale

como un beso que te manda la muerte.

Luis Borja-Disparo

31.

Mi corazón ha agradecido ese recado de la belleza.

René Rodas-El camino V

32.

Poeta es el hombre equivocado.

René Rodas– XV. Este es un supremo mandato

33.

El perro ladra y en su lenguaje

conversa con mis humillaciones.

Susana Reyes-Álbum de niñas con abuela IV

34.

Ninguna calle dijo nada de su rostro

Ninguna calle se reconoce a sí misma.

Susana Reyes-Álbum de niñas con abuela V

35.

Una ventana rota es el inicio de un vuelo

o el indicio de un pájaro herido.

Rob Escobar-Aforismos

36.

Si muriera en un día brumoso, me haría cargo de mi muerte.

Rob Escobar-Estado regresivo

37.

Guarda en tu boca todo el silencio del universo.

William Alfaro -Silencio

38.

Ayer comprendí muchas cosas,

entre ellas,

la razón del odio y la soledad.

William Alfaro– Las gaviotas de San Pedro

39.

Las lágrimas se rompen cuando los adioses llegan.

Katherine Rivera Mundo- El autobús no hace paradas en el tiempo

 

40.

Aquí decimos nada

y confesamos todo,

fingimos nombres para asegurar la noche,

o morirnos

hasta que nos trague el miedo.

Katherine Rivera Mundo-A corazón quitado

41.

Eres una lágrima de Dios emocionado.

Jorge Galán-Niño que se contempla en una fuente oscura

42.

El amor nos dio nombres, pero solo pudimos

decirlos en lo odiado.

Jorge Galán-El Silencio del padre

43.

Quien es hijo de cura es hijo de nadie

Mauricio Vallejo Márquez -La venganza

44.

Tan lejos estás que sólo la palabra te acerca.

Mauricio Vallejo Márquez-Trece

45.

Cuando sepas que he muerto no pronuncies mi nombre.

Roque Dalton– Alta hora de la noche

46.

Pensar a solas duele. No hay nadie a quien golpear. No hay nadie

a quien dejar piadosamente perdonado.

Roque Dalton– Estudio con algo de tedio

47.

Nada mío sale de mi boca.

El poema nace pese a mí.

Edgardo Quijada Urías– Oscuro

48.

De tanto evocar el pasado perdiste el presente.

El que se fue, fue alguien.

Nadie el que regresó.

Quijada Urías-Biografía

49.

Yo, Quirino vega,

Siempre anduve en camisa de once varas

Por decir la verdad a quema ropa.

José Roberto Cea– Yo, el brujo

50.

Tantos han extraviado la palabra

Que a muchos nos rompe la nostalgia.

José Roberto Cea– Crónica salvadoreña

51.

Nosotros,

Los malditos,

Estamos condenados a pensar en la muerte.

Rafael Mendoza– Poemas desde la cama V

52.

Pero no somos uno. Somos muchos.

Y a veces nos morimos de vacío

De tristeza

De muerte nacional.

Rafael Mendoza– El arte de morir

53.

Desnuda sos más que el mundo.

Mauricio Vallejo– Vení mamita chula

54.

Sólo que no te engañes, yo soy éste, el que va a morir.

Ni prócer ni Dios, no héroe ni mártir.

Mauricio Vallejo-De probada y correr o quedarse

55.

Porque me quema a veces la nostalgia,

el asombro en la voz, el pase en corto,

las perras ganas de aguantar a los fantasmas.

Jaime Suárez Quemaìn– Un disparo colectivo

56.

Viejo,

Tengo una deuda contigo,

Me querías ingeniero,

Y te salí poeta.

Jaime Suárez Quemaín– Un round a tu recuerdo

57.

el tiempo está detrás de la puerta

detrás de la puerta habitan los relojes.

Lya Ayala-relojes

58.

esencialmente los poetas no sirven para nada

las grandes hazañas tienen un cadáver

los poetas no tienen ni siquiera un muerto.

Lya Ayala– Esencialmente

59.

Uno dice y no entiende

Eso duele.

Mario Zetino– Uno dice

60.

La noche tiene tantas puertas

y yo estoy llamando a cada una de ellas

y sé que cada golpe es un inútil.

Mario Zetino– Sé que debo volver

61.

El aire no conoce mi nueva dirección.

Amada libertad

62.

Nadie sabe quién es el dueño de la sombra

que llora al pie de la tumba.

Noé Lima-Ceremonia privada

63.

Hay noches en que la lluvia cae más profunda que un adiós

Teresa Andrade – Día I.

64.

Aquí en este poema donde un pájaro bebe.

David Escobar Galindo– Lluviosas oraciones en pos de una elegía

65.

El instante magnifico

sirve de piloto a la verdad desnuda.

David Escobar Galindo-Esquilas y Vilanos 30

66.

Necesito un espejo.

No hay nada que me cubra la oquedad.

Claribel Alegria– Autoretrato

67.

No puede conmigo

la tristeza

la arrastro hacia la vida

y se evapora.

Claribel Alegría-No puede

68.

La herida escoge siempre

la piel que ha cortejado la hermosura.

Carmen Gonzáles Huguet– Como una estrella dentro de su armadura

69.

Déjame que mi tacto se haga oído,

Que tu cuerpo su propio idioma invente

Y lo convierta en canto sumergido.

Carmen Gonzáles Huguet-Donde acaba el silencio VI

70.

Sabe que es el espíritu un abismo

y el corazón un mar.

Francisco Gavidia– Neurosis

71.

No es hijo el porvenir de la fortuna

Ni es el azar el padre de la gloria.

Francisco Gavidia– Oda a Centroamérica

72.

Mi palabra carcome como la polilla.

Roberto Armijo– Los parajes de la luna y la sangre

 

73.

El dolor es espina en mi sonrisa.

Roberto Armijo- Son cuatro inviernos…

74.

Señor, te doy gracias de tener un nombre:

de ser un hombre y no una cosa innominada…

Alberto Guerra Trigueros-Te Deum

76.

Lo que importa es Dios, no la plegaria;

es el sacrificio, no la herida.

Y, contigo, mi mediocre vida

ha sido una vida extraordinaria.

Alberto Guerra Trigueros– Prosa

77.

El día es como un papel roto.

Vicente Rosales y Rosales-Día de otoño

78.

Mi llanto es una ropa que no uso.

Otoniel Guevara-Crónica de la ausencia.

79.

Si alguna vez me obligan a morirme

te dejo un gran amor para tus viajes.

Otoniel Guevara– Testamento del hijo

80.

Voy a cantar lo que nos duele cotidianamente

y cae como una gota amarga

al corazón.

Osvaldo Escobar Velado– Del dolor cotidiano

81.

Digan que somos lo que somos

un pueblo doloroso,

un pueblo analfabeto,

desnutrido y sin embargo fuerte

porque otro pueblo ya se habría muerto.

Osvaldo Escobar Velado-Patria exacta

82.

Prolongado latido

es en mi corazón lo que despiertas.

Claudia Lars-Sobre el Ángel y el Hombre

83.

Hoy tengo tus poemas en mis lágrimas

y el deseado mensaje -tan tuyo-

entra en mi corazón con mil años de ausencia.

Claudia Lars– Cartas escritas cuando crece la noche (I)

84.

Para juzgarme, nadie; para acusarme, yo.

Alberto Masferrer-Blasón

85.

Y entre el diablo y el mundo hicieron de mi sol,

en vez de luz, tinieblas; en vez de paz, dolor.

Alberto Masferrer-Blasón

86.

Escribo y me acerco,

se lo digo a mí mismo,

y me lamento.

Alfonso Fajardo– Contestando una pregunta de Rilke

87.

Hay una puerta el infierno y sólo yo tengo su llave.

Alfonso Fajardo-Fuente luminosa

88.

Me fui. Creo que vi la mano que se despidió

de mi inocencia, y creo que escribí un verso

agradecido para ella.

Jorge Avalos– La máscara y el rostro

89.

En oro se tornan

mis palabras

porque son y porque admiten

una verdad sin historia:

La belleza existe.

Jorge Avalos– La máscara y el rostro

90.

Solo los locos saben el camino de Dios.

Elena Salamanca– Sobre la piedra de la locura

91.

No hay viento que sople tan fuerte como el pasado de las mujeres.

Elena Salamanca-Poemas de las sangres encontradas

92.

Está el que lo encuentra todo

y regresa con sus pasos humanos de los mil y un viajes

y no trae nada

pero si lo vivido.

Javier Alas-Hay quien busca

93.

Jamás mis manos estuvieron tan vacías,

aunque mi corazón está colmado.

Javier Alas-Hija

94.

Todo color es vano y no existe memoria

más que de este ardor que ya desangra.

Rafael Menjívar Ochoa– Un viejo amor

95.

Uno, alguna vez, tendrá los ojos vidriosos

y dirá la palabra equivocada

y cantará sin tono

y no habrá quien lo escuche.

Rafael Menjívar Ochoa– Epilogo

96.

Para entender el presente y el pasado

hay que entender el futuro.

Rolando Costa-Elemental

97.

Tengo miedo; pero es agradable. No entiendo;

Pero es agradable. Me separo, es verdaderamente agradable…

Adiós, lo que hayamos sido…

Rolando Costa– Sangre

 

98.

Tu presencia está en mí como las brisas

que aprisionan las grandes soledades.

Irma Lanzas-Esquema de tu nueva presencia

99.

…el tiempo que viene y que pasa,

no puede mirarse

y sólo se siente pasar.

Irma Lanzas-Balada del tiempo que pasa

100.

Soy nada más el hombre a solas

que contempla este pequeño barco.

Miguel Huezo Mixco– La partida

101.

La alegría es una débil vida que se queja.

Miguel Huezo Mixco– Burdel en un puerto salvadoreño

102.

Uno quisiera que la noche fuera eterna,

que no hubiera cansancio ni ojeras.

Pero está el sueño, y están las camas

y los que en ellas nos olvidan.

Osvaldo Hernández Alas-Animales del insomnio 1

103.

La culpa es un animal muerto que uno lleva

atado a una cuerda,

y que va dejando en el camino pedazos de piel

que todos reconocen.

Osvaldo Hernández Alas-Laberintos 19

104.

Señor

ha llegado la hora

de que canten los gallos.

Esta vez

no te negaremos.

Julio Iraheta Santos-No hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti

105.

Díganme que no es cierto Que todo es pesadilla

Quiten los calendarios Borren el mes de julio

También quemen mi nombre ¡Oh! Dios dame otra historia

!Qué nunca llegue julio con mi cachorro muerto!

Julio Iraheta Santos-Segunda elegia 5

106.

nada vale la lágrima en esta hora

en que el cielo sangra moribundo

Jennifer Valiente-Postpoesía

107.

Pero puedo decir te quiero

así que

deja de apoyar ese puñal en mi garganta

Y atravesarla de una vez.

Jennifer Valiente– 10: 00 P.M.

108.

Esas ganas insolentes de hacer crecer en mi mano tu deseo

Elmer Menjívar-Tené cuidado

109.

Te propongo un alma como la mía:

insomne, distraída, impuntual,

rebosante de excusas y decepciones.

Elmer Menjívar-Propuesta

110.

Yo sé que no es en vano todo intento

de usar la vela que al vagar se aferra

porque después del mar hay otra tierra.

Alberto López Serrano-Certeza

111.

Por eso busco en tus labios la chispa que mi pólvora desate,

la chispa que me incendie todos los sentidos,

todas las costumbres.

Alberto López Serrano– Y qué imposible no llamarte ingle XVII

 

112.

Eres la geografía de este amor arrebatado.

Mario Noel Rodríguez-Pequeño

113.

Me gustas cuando gritas porque trastornas el presente.

Mario Noel Rodríguez-Poema cero

114.

Va llegando la noche. Ya no se mira el mar.

Y que asco y que tristeza comenzar a bajar

Alfredo Espino-Ascensión

115.

Un eco de canciones en el silencio vaga…

Un arrebol lejano sobre el charco se apaga…

Alfredo Espino-Acuarela salvaje

116.

Yo

el que guarda en la sonrisa

al asesino

dime qué hago con estos ojos

que nacieron para verte.

Carlos Ernesto García-Mañana de invierno sin ella

117.

Un mar

que hace muchos años

dejó de dar la alegre bienvenida

para decir un plañidero adiós.

 Carlos Ernesto García-Un plañidero adiós

118.

Me pintaste quizá un poco triste

Porque acaso sabías, sin saberlo,

Que sólo tú podrías darme vida.

Matilde Elena López– Mirándome en tu cuadro

119.

Tú, responde a ti mismo

porque nadie puede responder por ti.

Matilde Elena López-Los sollozos oscuros

120.

Quiero escuchar como respira en vos el universo

y descubrirme en el milagro sin edad de tus pupilas.

Silvia Elena Regalado-Breve conversación con Dios

121.

El amor vuelve

de los abismos

como un viejo milagro

en nuestra edad de niños.

Silvia Elena Regalado-Viejo milagro

122.

El corazón no aprende,

Tampoco el cuerpo,

(Ambos desconocen

La palabra mordaza).

Rene Chacón-Los ángeles amantes

123.

Hay días en que el silencio de lo inevitable,

con sus plumas de ahora y siempre

sacuden el naufragio de las despedidas.

Rene Chacón– Hay días en que el zoológico del alma

124.

Me da miedo el encuentro de tu sangre y mi sangre,

no poder traducir el lenguaje distinto

de tus actos que vuelan en la flor y las aves.

Manlio Argueta– Temor imaginado

125.

Sólo tu ofrenda libre me repone del miedo

para vencer lo real de tu asombro desnudo

que al tacto de mis manos es piel imaginada.

Manlio Argueta-Temor imaginado

126.

Dónde están mis ganas de decir tu cuerpo

De hablar de tus olores… de tus fuegos.

Aída Párraga– Amor sintiendo

127.

Lo injusto es esta carne,

esta piel que me detiene,

esta espalda incapaz

de explotar en alas.

Aida Párraga-Injusticias

128.

Oigo el mar

y hubiera preferido

ser musico

que vivir esta angustia perenne

de seguir el rastro de la palabra.

Gabriel Otero-Puerto escondido 1

129.

De tanto mirar al cielo

se le extravió el horizonte.

Gabriel Otero– Misterio 2

130.

Conocimos la luna y fuimos más allá

pero aún no sabemos de dónde es que venimos

ni para donde vamos.

María Cristina Orantes- Dos mil años después

131.

Silencio.

El iceberg de sus ojos

cayó sobre la noche.

María Cristina Orantes-Iceberg

132.

Será mi muerte

y nadie podrá quitármela

nadie vendrá a dolerse en el lugar en el que estoy

nadie vendrá a morir por mí.

Allan Barrera– Ser para la muerte

133.

Madre

perdóname

otra vez quise

hablar de lo tuyo

y terminé hablando

terriblemente de lo mío.

Allan Barrera-Diálogos de ceniza

134.

La locura no nos salva de olvidarnos.

Francisca Alfaro– Nihilismo II

135.

Qué sería de la piedra si el corazón también fuera una mentira.

Francisca Alfaro-Las palabras

136.

Amo a los defines

porque son más

inteligentes que las armas.

Hilda Henríquez-El amor a los delfines

137.

La promesa dentro de mí es silencio.

Todo porque una sombra

se ha refugiado en mi fuego.

Hilda Henríquez-La extraña voz

 

138.

Todas las esquinas son iguales cuando se espera.

Carlos Clará-Fotografía de dos

139.

No debí mirarte a los ojos

…y entrar

Carlos Clará-Séptima revelación del no retorno

140.

Cuando te compartes con otro

con todos

porque sos demasiado bella para uno

para mí

para ninguno.

Andrés Norman Castro– Cuando te fuiste

141.

Bebo tu nombre,

on the rocks,

puro,

y me emborracho.

Andrés Norman Castro– Despedida

142. 

Por tanta sangre

aquí tendremos pronto

también Mar Rojo.

Alberto Jirón Flamenco– Haikús Rojos

143.

Esta tierra ensangrentada con tu sangre,

quizá mañana también lo esté con la mía.

Alberto Jiron Flamenco-Haikús Rojos

144.

Cierta vez el mar de la noche entró a mi cuarto

Desde entonces mis sueños se llenan de estrellas.

Pedro Valle-Sensibilidad

145.

Los caminos

no tienen alfabetos

para una canción.

Pedro Valle-Estancias

146.

Desnuda sos la tumba

que nos devolverá a la vida

en la hora del triunfo.

Amilcar Colocho-Mujer

147.

Olvidaré que en mi mochila la muerte

ocupaba el mejor espacio.

Amilcar Colocho-Para luego

148.

Para olvidarte

Yo no sabía en qué lugar poner tu recuerdo.

Kike Zepeda– Alza de la violencia

149.

La primera vez que vi tu espalda desnuda

Quise saber cómo se llegaba al cielo

Luego vi tu trenza y supe que habías puesto ahí todos mis pasos.

Kike Zepeda-El sendero oculto

150.

El hombre tiene una sombra sobre su rostro

que no le deja ver nada.

César Ramírez Caralvá– Acá están

151.

La perfección

le importa poco a ella

que sólo espera

su momento

para decidirse

y caer

sin clemencia

sobre una presa distraída.

Alvaro Rivera Larios– A Evelyn

152.

De ciertas victorias no conviene presumir.

Alvaro Rivera Larios

153.

Soy un paria jugando con cenizas

mis manos no serán más lagrimas

a donde tendrá que morir Dios.

David Duke Mental-Paria

154.

No deseo la soledad porque duele

cuando tengo la lluvia al borde de los labios.

Any Abrego– Imaginé que llovía

155.

Todo es una serpiente

que se enrosca en sí misma hasta incendiarse.

Carlos Santos– IX Bar de la guerra

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Amaneceres de temblores y colores. Fotografía de Rob Escobar. Portada Suplemento Cultural Tres Mil. Sábado,16 noviembre 2024