Francisco Melgar Brizuela*
En el marco de este nuevo aniversario de la UES felicito a los compañeros docentes, estudiantes y personal administrativo. Un atento saludo a las nuevas autoridades: al Sr. Rector MSc. Roger Arias y al Sr. Vice-rector Académico Dr. Manuel de Jesús Joya, a quienes les deseo éxitos en la conducción de nuestra Alma Mater. También le deseo éxitos a los compañeros que recientemente fundaron el sindicato de docentes de la UES y espero que con su esfuerzo promuevan la dignificación de los profesores universitarios a través de las capacitaciones científico-culturales. Sugiero que se aproveche el proyecto de las nuevas autoridades para impulsar los estudios de postgrado en forma gratuita para los docentes de la UES.
En este nuevo aniversario la UES se viste de gala al recibir, a principios del presente mes, dos prestigiosos reconocimientos otorgados por la Universidad de la Habana: el primero, El Doctorado Honoris Causa en Filosofía de la Educación al maestro Luis Argueta Antillón, quien, de una manera patriótica y desinteresada, ha estado fungiendo como rector de la UES durante todo este período de crisis electoral provocado por los y las que llevaron el problema a la Sala de lo Constitucional. Afortunadamente, la Sala le dio la razón a lo actuado por nuestra Honorable Asamblea General Universitaria. El segundo, el IX PREMIO SAPIENTIAE a la excelencia educativa otorgado a la UNIVERSIDAD DE EL SALVADOR por su lucha, a través de la historia, por impulsar el desarrollo de la ciencia y la cultura. Honor a quien Honor merece. Agradecemos al Dr. Argueta Antillón por haber dedicado su vida a la docencia y haber contribuido, como uno de los mejores intelectuales, a la comprensión y a la solución de los problemas que aquejan a nuestro país.
La Historia de la UES debe ser un motivo de orgullo para todos sus hijos. El IX PREMIO SAPIENTIAE así lo confirma. Se trata de una historia de lucha por la educación, la ciencia, la cultura y la libertad de pensamiento al servicio del pueblo salvadoreño. Por tal motivo presentamos a continuación un breve resumen de sus gloriosas luchas y de las más sobresalientes reformas universitarias a través de la historia. Afortunadamente la UES, fundada el 16 de febrero de 1841, no nació ni como universidad colonial ni pontificia; sin embargo, en sus primeros años estuvo dirigida por un clero que pretendía amordazar la libertad de pensamiento, restringiendo la lectura de sus estudiantes a los libros previamente seleccionados por las autoridades eclesiales. Pronto, siete estudiantes de mente lúcida se rebelaron contra esta disposición típica de la Inquisición. Hoy los recordamos por su valiente actitud en contra del dogmatismo y porque forman parte de la historia por construir la ciencia en esta institución: fueron ellos: Manuel Gallardo, Juan Bosque, Cayetano Bosque, Gregorio Avalos, Miguel Brioso, José Flamenco y Juan José Cañas. La mayoría de ellos llegaron a ser profesionales de éxito.
A inicios de la década de 1850 podríamos decir que se produjo la primera Reforma Universitaria. El presidente Doroteo Vasconcelos, de pensamiento progresista, contrató al científico franco-español Julio Rossignon para que impulsara los estudios de las ciencias naturales. Rossignon, además de ser un científico, mostraba en sus discursos un pensamiento filosófico en sintonía con la época, ilustrado y positivista. Este impulso se vió interrumpido por el devastador terremoto del 16 de Abril de 1964.
La segunda reforma universitaria tuvo lugar en el período presidencial del General Gerardo Barrios (1958-1963). Durante su gobierno emprendió una lucha a favor del pueblo. Impulsó la educación a lo largo y ancho de nuestro país y promovió la educación de las niñas. En la UES comenzó por sanearla, expulsando a los malos docentes. Luego, le inyectó un gran dinamismo al desarrollo de la ciencia, la técnica y las diferentes manifestaciones de la cultura. No solo apoyó los estudios de las ciencias naturales sino también los de Ingeniera proponiendo que éstos tuvieran carácter universitario, impulsando la creación de la Facultad de Ingeniera. Esta fue una propuesta renovadora dado que dichos estudios, en la mayoría de los países europeos, se hacían en Institutos Técnicos. Las fuerzas reaccionarias derrocaron el gobierno de Barrios en 1963 y el General fue vilmente fusilado el 29 de agosto de 1965; sin embargo, los ideales de Barrios no fallecieron y fueron reactivados a principios de la década de 1870. La creación de la Facultad de Ingeniería tuvo que esperar hasta el año de 1879.
En el llamado período liberal-positivista, de 1871 a 1890, se produjo la más grande reforma universitaria del siglo XIX. El país fue gobernado, sucesivamente, por tres presidentes de pensamiento progresista: el General Santiago González, El Dr. Rafael Zaldívar y el General Francisco Menéndez. Durante este período la Facultad de Medicina brilló como una de las mejores de Latinoamérica; se fundó la Facultad de Química y Farmacia por iniciativa de Don Ambrosio Méndez quien sostuvo que El Salvador no necesitaba importar medicinas del extranjero ya que en nuestra flora y fauna se encuentran los elementos activos para curar cualquier tipo de enfermedades, incluyendo el cáncer. La UES también contó con uno de los mejores matemáticos del mundo, Don Alberto Sánchez, que nació en la ciudad de Santa Ana el 16 de julio de 1864. Antonia Navarro, fue la primera mujer, en Iberoamérica, que se graduó como ingeniera. En este período la UES fue la primera en proponer el concepto de Autonomía Universitaria que germinó con el famoso grito de Córdova en 1918.
Otra importante reforma universitaria se produjo durante el período rectoral del Dr. Carlos Llerena, médico de profesión, a partir de 1946. Llerena trajo científicos de varios países para impulsar el desarrollo de la UES. Se fundó la Facultad de Economía. La Reforma Universitaria 1963-1968, impulsada por el Dr. Fabio Castillo Figueroa es considerada por algunos analistas como la reforma universitaria más vigorosa de Latinoamérica en el siglo XX. Fabio Castillo ha sido considerado como el más grande luchador por la educación, la ciencia, la cultura y la democracia en la historia de nuestro país. Dado que Fabio es ampliamente conocido en nuestro medio, me abstengo de extenderme acerca de su personalidad y su reforma pero aprovecho para sugerir que la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas, fundada por él el 5 de septiembre de 1991, sea distinguida con el nombre del Dr. Fabio Castillo Figueroa. La UES siempre ha tenido un gran potencial para desarrollarse a través de Reformas Universitarias que se producen cuando se juntan las condiciones necesarias y el espíritu de sus mejores hijos para llevarlas adelante. La promoción de la investigación científica es parte del proyecto universitario de sus nuevas autoridades.
Para finalizar este artículo quiero resaltar, a manera de ejemplo, algunos de los proyectos de investigación más importantes de la UES y pido disculpas por no poderle hacer justicia a una cantidad grande de investigaciones que tienen lugar en sus doce facultades. Entre ellos, el proyecto LABTOX-UES, dirigido por el MSc. Oscar Amaya y la MSc. Rebeca Quintanilla, las investigaciones que se realizan en algunos Departamentos de reciente creación como el de Antropología y el de Historia, las investigaciones de las culturas indígenas que lleva adelante el Dr. Luis Melgar Brizuela del Departamento de Letras. Me he referido a estas últimas porque a veces no se les da la debida importancia. Me limito a señalar que el conocimiento histórico es esencial para comprender una gran cantidad de problemas que vivimos en la actualidad, que la Antropología es indispensable para lograr un entendimiento mínimo de la cultura y que la Filosofía Maya y el idioma Nahuat han constituido enormes fuentes de conocimiento de la filosofía actual, de la semiótica y del estructuralismo lingüístico iniciado por el antropólogo Claude Levy-Strauss. Algunas investigaciones para la docencia han estado huérfanas de apoyo, como las que realiza el maestro Américo Mejía en el área de la Astrofísica.
Esperamos que las nuevas autoridades establezcan las bases para impulsar la primera Reforma Universitaria del siglo XXI. Con el esfuerzo de todos, podemos lograrlo.
*Físico, matemático y filósofo.
Docente de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas.