Por Raimundo López
Sputnik
Este año será el preámbulo de las elecciones de febrero de 2024 en El Salvador, en las que el presidente Nayib Bukele anunció su propósito de buscar la reelección, algo sin precedentes en la historia reciente y que la oposición considera inconstitucional.
“Ese es un tema nuevo, es algo que no se ha dado”, admitió Noel Orellana, uno de los cinco magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), al ser consultado sobre cómo esa institución prevé ordenar la participación del gobernante en los pasos iniciales de los comicios.
Orellana explicó en una entrevista radial que el Tribunal prepara un instructivo con ese propósito, pero optó por la reserva en torno a esas disposiciones.
En cambio, la oposición comenzó sus preparativos en unos comicios que encaran cuesta arriba, a juzgar por las encuestas, y desde los sectores populares ya surgió la propuesta de formar un frente amplio para enfrentar en las urnas la decisión de Bukele de prolongar su gobierno otros cinco años.
La iniciativa es impulsada por el Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular (BRP), un diverso proyecto de unión de fuerzas sindicales, profesionales, defensoras de derechos humanos, el medio ambiente y otros sectores progresistas y de izquierda creado el año pasado.
“En nuestra Proclama al País por un Gobierno de Rescate Nacional, invitamos a las fuerzas de izquierda, democráticas y progresistas a crear un frente amplio que luche contra el actual régimen”, afirmó a la Agencia Sputnik la dirigente estudiantil universitaria Marisela Ramírez.
La joven, que forma parte del equipo de conducción del BRP, precisó que los objetivos del frente son derrotar el actual proyecto gubernamental “corrupto y autoritario”, rescatar al país “del retroceso” y ponerlo “en la ruta democrática de los Acuerdos de Paz de 1992”.
La mayoría de los partidos ya puso en marcha su maquinaria electoral, e incluso el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda) realizó el 3 de diciembre pasado una convención nacional para definir su política de alianzas hacia los comicios.
LOS INÉDITOS PASOS HACIA UNA REELECCIÓN
El presidente Bukele confirmó el 15 de septiembre pasado, en un discurso por el aniversario de la independencia del país, su decisión de presentarse como candidato a la reelección en los comicios del 4 de febrero de 2023.
Ya para entonces había saltado el primer obstáculo, cuando el 3 de septiembre de 2021 la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia interpretó varios artículos de la carta magna y concluyó que estos no prohíben la reelección inmediata como opinan partidos y juristas opositores.
Los actuales magistrados de la Sala, la máxima instancia sobre la constitucionalidad de las leyes, fueron electos por la amplia mayoría del gobernante partido Nuevas Ideas el 1 de mayo de ese año, en uno de sus primeros actos al tomar posesión de sus escaños ese día.
Tres meses después, el 3 de septiembre, declararon constitucional la decisión de Bukele de buscar un nuevo mandato consecutivo en la presidencia y fue tajante en su decisión:
“Ordénese al Tribunal Supremo Electoral dar cumplimiento a la presente resolución en lo relacionado a permitir de conformidad con el artículo 152 ordinal 1° que una persona que ejerza la Presidencia de la República y no haya sido Presidente en el periodo inmediato anterior participe en la contienda electoral por una segunda ocasión”.
El artículo 152 estipula que no podrán ser candidatos a Presidente de la República quien haya desempeñado dicho cargo “por más de seis meses, consecutivos o no, durante el período inmediato anterior, o dentro de los últimos seis meses anteriores al inicio del período presidencial”.
Tras un extenso análisis en la sentencia, los magistrados concluyeron que “en el caso del artículo 152 ordinal primero, la prohibición va dirigida a los candidatos, de manera que permite por una sola vez más, la reelección presidencial”.
Así, en el caso de Bukele, fue candidato en el período presidencial 2014-2019.
Cuatro de los cinco magistrados, entre ellos la presidenta del TSE, Dora Esmeralda Martínez, afirmaron que las sentencias de la Sala de lo Constitucional son inapelables y de obligatorio cumplimiento.
La anunciada candidatura de Bukele presenta otros aspectos inéditos: el 5 de julio vence el plazo para realizar las internas de los partidos para escoger a sus candidatos y la pregunta es… ¿cómo participará el Presidente de la República en esas elecciones?
La ley prohíbe a los funcionarios públicos participar en actividades proselitistas e incluso inaugurar obras de gobierno en tiempos de elecciones.
Por lo establecido en el artículo 152 ordinal primero de la carta magna, Bukele para ser candidato no puede ejercer la presidencia “dentro de los últimos seis meses anteriores al inicio del período presidencial”, por lo cual deberá abandonar el cargo antes del 1 de noviembre de este año.
Todo indica que estos son puntos a considerar en el instructivo que, según el magistrado Orellana, prepara el TSE. La contienda apenas comienza, pero todo indica será una tensa carrera con la primera meta el 4 de febrero de 2024, en las elecciones presidenciales y para la Asamblea Legislativa; y la segunda, el 3 de marzo siguiente, para las alcaldías y el Parlamento Centroamericano.
El panorama de la arrancada lo dibujó una encuesta de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) el día 19, coincidente en términos generales con otros estudios de opinión.
La popularidad del presidente Bukele continúa alta: 8.37 es la nota promedio en una escala de 1 a 10 al cierre de 2022, una elevación de 0,83 puntos en comparación con 2021, según la UCA.
Su partido, Nuevas Ideas, encabeza las simpatías con 33,9 por ciento de los consultados, más de 30 puntos de ventaja del segundo lugar, la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), con 2,0 por ciento, y el tercero, el FMLN, 1,3.