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@GloriaCoLatino
“Estamos aquí para honrar la memoria de las cuatro mujeres religiosas que fueron asesinadas cruelmente por la Guardia Nacional, viagra apoyada por el gobierno estadounidense”, dijo Claire White, quien junto a miembros de la Fundación SHARE y la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) exigieron justicia y condena a los autores intelectuales del cuádruple crimen.
Claire White es hija del ex embajador de los Estados Unidos en El Salvador, Robert White, quien en la década de los años ochenta denunció este hecho violento sin obtener justicia para sus conciudadanas. White se dedicó junto a organizaciones no gubernamentales a denunciar el crimen y murió esperando una respuesta en enero del presente año.
“Estoy conmovida de estar frente a este monumento y exigir justicia por estas cuatro jóvenes religiosas, para que se esclarezca este crimen tan brutal, claro sin olvidarnos tampoco de los 70 mil personas que fueron desaparecidas o asesinadas”, expresó.
El asesinato de las religiosas Maura Clarke, Ita Ford, Ursulina Dorothy Kasel y la misionera religiosa laica, Jean Donovan, el 2 de diciembre de 1980, por elementos de la Guardia Nacional (GN) luego que llegarán al aeropuerto en Comalapa, La Paz, fue encubierto por el entonces, director de la Guardia Nacional y posterior Ministro de la Defensa, Coronel Carlos Eugenio Vides Casanova, caso documentado en el Informe de la “Comisión de la Verdad”.
“Al ver todos estos nombres que sobrepasan los 30 mil, puedo decir sin ninguna duda, que cada una de estas personas valen lo mismo y deben recibir justicia, para beneficio de ellas y sus familiares. Es una gran impunidad cuando los autores de estos hechos caminan libres por las calles de este país o viven en Miami ”, dijo.
Alejandro Díaz, de Tutela Legal “María Julia Hernández”, explicó que en el caso del asesinato de las religiosas Maryknoll no se investigó en ningún momento a los autores intelectuales que encubrieron a otros militares.
“La petición de justicia para la Fiscalía General de la República es para que se busque esta verdad de los hechos que ocurrieron; se hizo una investigación que solo juzgó a los actores materiales del violento hecho, pero nunca a los intelectuales y el Sistema de Derechos Humanos ya dijo que estos delitos no prescriben y la Ley de Amnistía no es suficiente para protegerlos”, argumentó.
El Procurador David Morales enfatizó que a la fecha el Estado de El Salvador ha faltado a la investigación de los responsables que ordenaron y efectuaron las ejecuciones de las religiosas.
“La Fiscalía General de la República debe cumplir su papel de abrir una investigación y evite así continuar abonando a la impunidad existente en el país”, afirmó.
