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El diputado de la derechista ARENA, discount Roberto d´Aubuisson, afirmó que “a mi el presidente no me va a callar”, ante una petición de antejuicio del mandatario Mauricio Funes al congreso para procesarlo judicialmente por el delito de “difamación”, junto a la también legisladora, Ana Vilma de Escobar.
“Quiero dejar bien claro, a mi el presidente (Funes) no me va a callar, tengo el derecho, la obligación y la responsabilidad para con el pueblo salvadoreño”, aseguró el legislador a la prensa tras ser cuestionado si mantenía su versión de que el mandatario viajaba en un lujoso vehículo accidentado el mes pasado en una zona exclusiva de San Salvador.
d´Aubuisson afirmó en una entrevista televisiva que ha presentado el mandatario al congreso como prueba para la apertura de un antejuicio contra el diputado de derecha, que tras el percance vial “lo vimos (a Funes) inflamado de la cara (…) pero la cadera, eso solamente pasa, discúlpeme, según lo que hemos investigado, eso únicamente pasa por un accidente de vehículo”.
“Estamos hablando de un caso inaudito en la ciencia médica, una persona de cincuenta años que goza de excelente salud se deshace la cadera y tienen que hacerle implante de cadera por una caída desde una altura (…)”, subrayó el parlamentario en el programa 8 en Punto, de canal 33. El gobernante salvadoreño fue sometido a una operación de cadera en un hospital privado, con la intervención de médicos del principal hospital nacional del país, luego de haberse fracturado la cadera por una caída mientras se alistaba para asistir a un evento público, al que no acudió.
Funes ha presentado al congreso sendos informes periodísticos y vídeos de entrevistas televisivas en los que el legislador afirma que el mandatario salvadoreño viajaba en un vehículo Ferrari accidentado en el Redondel Masferrer, en la exclusiva colonia Escalón.
d´Aubuisson aseguró que la petición de antejuicio de Funes ante el parlamento, “no tiene fundamento legal” por haber tergiversado su nombre oficial, y por considerar que ello “es una acción política del presidente para tratar de engañarnos”. “No hay tal delito, son simplemente dudas que se han generado de sus mismas contradicciones”, subrayó.
El gobernante también ha pedido la apertura de un antejuicio contra la parlamentaria de Escobar por los delitos de “calumnia” y “difamación” por haber afirmado que Funes “no pudo ser intervenido de inmediato (en el hospital privado) debido a los niveles de alcohol y otras sustancias que había consumido” antes de accidentarse el Ferrari.
“No se vale venir a acusar y atropellar a los diputados de la manera como lo ha hecho el presidente de la República”, exclamó la funcionaria, quien consideró que la petición de antejuicio del mandatario contra su persona ha sido hecha “simplemente por criticar o pedir a la Fiscalía que investigue”.
El caso de ambos diputados es tratado en la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales del parlamento, que la víspera ordenó a su técnico la elaboración de un informe sobre si existe asidero legal para crear una nueva instancia que procese a los parlamentarios de ARENA. De Escobar vinculó su caso a una supuesta violación de la “libertad de expresión, pilar fundamental de la democracia”, y advirtió a los diputados que integran la comisión legislativa que “en la medida que esta comisión proceda, se va a estar volviendo más vulnerable esta Asamblea (Legislativa). Más vale que se vaya todo el mundo a su casa, porque nadie va a hablar ni decir nada”.
También criticó al gobernante por vincularla en un presunto acto de corrupción en el manejo de un fideicomiso por casi $40 millones para la creación de empleos y que los habría distribuido entre empresarios allegados a su persona.
El caso es investigado por la Fiscalía General de la República, luego que las autoridades del Ministerio de Economía lo denunciaran a principios de este año. “Continúa difamándome, acusándome de haber manejado mal los fondos y dando a entender de que me he apropiado indebidamente”, aseguró la parlamentaria, a quien meses atrás la Corte de Cuentas le sacó a luz otro supuesto “reparo” por $11 millones cuando fungió como directora del Seguro Social, durante la administración del cuestionado ex presidente Francisco Flores.
“Mi nombre va a quedar limpio… Nunca he tocado un centavo, tengo solvencia moral”, apuntó.