Por Manahen González
@ManahenGza
El Salvador perdió el viernes 1-3 ante México y quedó fuera de las eliminatorias mundialistas rumbo a Rusia 2018 y, tal como se esperaba, las redes sociales estallaron con ataques contra la dirigencia de la FESFUT que, en demasía, tuvo culpa de que el sueño de ir a un tercer mundial se truncara.
Ahora bien, quiero dejar claro que, con los argumentos que expondré a continuación, no pretendo defender a nadie, sino que únicamente traer al primer plano una pregunta que cada vez que una selección mayor fracasa y se ataca a la FESFUT me surge: ¿a quién quieren en la FESFUT?
Y esta pregunta surge porque en los pocos años que llevo en el periodismo deportivo veo que colegas, aficionados, dirigentes, jugadores y ex jugadores cargan contra los dirigentes de la FESFUT cada vez que algo sale mal.
No obstante, también en estos años que llevo en el periodismo he escuchado una y mil veces opiniones de periodistas, jugadores, aficionados y dirigentes que la persona idónea para tomar las riendas de la FESFUT es alguien “de fútbol”.
Pero, ¿acaso no es lo que pasó con el actual Comité Ejecutivo de la FESFUT? Recuerdo que cuándo se eligió a Jorge Rajo como titular del ente rector del fútbol y luego de una serie de cosas que empañaron la gestión de Carlos Méndez Cabezas, quien, para muchos, no era alguien de fútbol y por eso no era el idóneo, muchos colegas celebraron que por fin “alguien de fútbol” había llegado al frente de la FESFUT.
Y es que Rajo, un ex futbolista, técnico, directivo de Alianza y expresidente de Primera División, era, para muchos, el indicado. Sin embargo, ahora, dos años después, esa teoría de que “alguien de fútbol” es el indicado para dirigir la FESFUT queda desvirtuada.
Porque para nadie es extraño la serie de cosas negativas que marcaron la gestión de Rajo: retiro de patrocinadores, conflicto con los jugadores, contratación de técnicos interinos, corte de procesos y contratación de un técnico que no ganó ni un solo partido al frente de la Selecta.
Eso sí, sus antecesores no fueron unos brillantes dirigentes, ya que Rodrigo Calvo, Reynaldo Vásquez y Carlos Méndez Cabezas tampoco sumaron éxitos a sus gestiones y no son recordados gratamente.
Y es por estas razones que planteo la pregunta: ¿a quién quieren en la FESFUT? Porque ya se probó con varias personas “de fútbol” y con otros que no eran “de fútbol” y los resultados siguen siendo los mismos.