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Buenos Aires/dpa
La activista social kirchnerista Milagro Sala cumple hoy 500 días en prisión en la norteña provincia argentina de Jujuy, pese a que varios organismos internacionales reclamaron que aguarde en libertad la resolución judicial de las causas en las que está acusada.
El caso de Milagro Sala alcanzó un eco internacional y se convirtió en un problema para el Gobierno del presidente Mauricio Macri, que alegó que por respeto a la división de poderes no puede influir en la Justicia de Jujuy.
El Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas reiteró hace pocos días que su arresto es «arbitrario», al tiempo que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) anunció que en junio visitará a la dirigente social en la prisión conocida como «Alto Comedero» de Jujuy, en el marco de la medida cautelar solicitada a favor de Sala.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, intercedió ante Macri por la libertad de la dirigente social, después de que organizaciones como Amnistía Internacional cuestionaron su detención.
En mayo, el papa Francisco le envió una carta a Sala a la cárcel de Jujuy, provincia fronteriza con Bolivia, en la que le aseguró comprender «su dolor y sufrimiento». «Quiero asegurarle que la acompaño con mi oración y los deseos de que todo se resuelva bien y pronto», señaló el argentino Jorge Bergoglio, quien también le envió tiempo atrás un rosario bendecido.
La Corte Suprema de Justicia tiene en tanto en estudio dos reclamos que podrían dejar a Sala en libertad.
Sala fue arrestada el 16 de enero de 2016 durante una protesta contra el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, de la coalición gobernante Cambiemos.
Desde que se encuentra detenida, Sala fue condenada en dos juicios por la Justicia provincial. La más grave de las penas recibidas fue de tres años de prisión en suspenso por daños agravados durante una manifestación realizada en 2009.
También está acusada de los presuntos delitos de fraude a la administración pública y asociación ilícita por no ejecutar una partida de 60 millones de pesos (3,7 millones de dólares) otorgados por el Estado para construir viviendas.
Sala es la principal referente de Túpac Amaru, una agrupación que en Jujuy llegó a tener más de 100.000 seguidores y recibió millonarios fondos del Estado para sus actividades durante los gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015).
La abogada de Sala, Elizabeth Gómez Alcorta, espera la decisión que tome la Corte Suprema.
«La mayor expectativa está puesta en los fueros de Milagro como parlamentaria (del Parlamento del Mercosur), porque se demostraría que es ilegal su detención. Y en consecuencia debería quedar en libertad en todas las causas», declaró la letrada en una entrevista que publicó hoy el diario «Página/12».
«Por otro lado, postulamos la arbitrariedad de la detención por falta de fundamento de lo que se conoce como los peligros procesales. Entendemos que no está justificado ni probado que ella quiera fugarse o pueda entorpecer la investigación en la causa por la que estamos haciendo el planteo. Lo cierto es que ella tiene (dictadas) otras prisiones preventivas, pero en caso que la Corte resuelva favorablemente, eso debería tener un impacto positivo sobre las otras dos causas» a las que se enfrenta, puntualizó Gómez Alcorta.
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