Mirna Jiménez
@DiarioCoLatino
El exembajador de El Salvador en Washington, Rubén Zamora dijo que sigue siendo preocupante el acuerdo migratorio “país seguro”, firmado por los gobiernos del presidente Nayib Bukele y el de Estados Unidos, Donald Trump porque son tratados “leoninos” que tienen muchas obligaciones y pocos beneficios para el país.
Zamora explicó que andar de un lado a otro con el embajador de Estados Unidos en El Salvador (Ronald Johnson) no estaría significando “buena amistad”; sino, al contrario en diplomacia esto significa “sumisión”, y aseguró que no es cierto que haciendo todo lo que piden el país del norte se logrará más cooperación.
“Estados Unidos pedirá cada día más y más”, advirtió el político centroizquierda.
Agregó que a casi seis meses de instalado el nuevo gobierno en El Salvador, no hay embajador en Washington, solo un encargado de negocios, lo que da la apariencia de debilidad. “Hay que recordar que existe una política bien agresiva del presidente de Estados Unidos, Donald Trump”, dijo y recordó que ese país sigue siendo potencia mundial y que las potencias “si el país se deja, lo aplastan”, comentó en el programa Encuentro en TVX.
Aseguró, además, que El Salvador no tiene condiciones para albergar a personas provenientes de otras naciones, mientras esperan que Estados Unidos les otorgue asilo. Asimismo, esto podría complicar el problema de inseguridad que ya vive el país, afirmó.
El acuerdo permitirá que personas que buscan asilo en Estados Unidos permanezcan en El Salvador, mientras se resuelve su situación. El Salvador no podrá sacarlos, ni mandarlos a otra parte, a no ser que Estados Unidos lo decida.
El acuerdo es inconstitucional, dijo Zamora, porque tiene contradicciones con la Constitución de la República en varios puntos. “Por ejemplo, estas personas no estarán sujetas a la ley migratoria del país; no obstante, el presidente de la República no quiere que este acuerdo pase por la Asamblea Legislativa”, dijo el exdiplomático
“Estas personas no estarán sujetas a la ley migratoria salvadoreña, sino que serán una excepción; la contradicción es que las excepciones solo las puede hacer la Asamblea Legislativa, y el gobierno de Bukele se niega a llevar esos acuerdos a la asamblea porque generará una inconstitucionalidad”, aseveró.
Recomendó al Ejecutivo que esos acuerdos vayan a la Asamblea Legislativa, porque además el país no está en condiciones para dar empleo, seguridad, salud pública y un lugar dónde estar a esa gente que busca asilo en Estados Unidos, y tampoco a que sus hijos tengan educación.
“Muchas veces, esa gente viene con su maletita nada más; en cuatro años (tiempo que podrían quedarse) se les acaba la ropa, hay que resolver esas necesidades”, precisó y lamentó que el Gobierno muestre tanta disposición para hacer todo lo que le diga la administración Trump.
“Yo lo que he visto hacer al Gobierno, respecto a Estados Unidos, es eso (total disposición ante EUA); todo lo que dijo Trump de nosotros, hasta con insultos de decirnos que somos unos delincuentes, como que se le olvidó (al presidente). Nos matan a un salvadoreño allá y la primera reacción del Ministerio de Relaciones Exteriores, es decir, que era un hondureño, es un guatemalteco y todo por no llevarle la contraria a Estados Unidos”, cuestionó.
A juicio de Zamora, no se quiere afrontar y se está viendo un nivel de sumisión en el problema más serio que El Salvador tiene, que es la migración. Reiteró que nada se ha logrado hasta ahora, ya que la extensión del TPS se ha dado por cuestiones jurídicas que obligan al gobierno de Trump a no deportar a los beneficiados con ese programa, mientras la justicia estadounidense resuelve una demanda legal interpuesta por este tema migratorio.
Zamora dijo que la actual administración del presidente Bukele carece de un Plan de Gobierno y lo único claro que se ve en la práctica es que este Ejecutivo hará todo lo que Estados Unidos dice, en un aparente afán de tener un “amigo”; pero “los Estados Unidos no tiene amigos, lo que tiene son intereses”, precisó el también exdirigente político.