Río de Janeiro/Brasil/AFP
Un país tan futbolero como Brasil debería estar pendiente del inicio de la Copa América, que la Canarinha no gana desde hace 12 años, pero los brasileños están más pendientes de las acusaciones de violación contra el astro Neymar que por lo que pueda hacer su equipo en el torneo de selecciones más viejo del mundo.
Además, Neymar, el ídolo de todo el país, se perderá la competición tras haber sufrido una lesión en el tobillo derecho en un partido amistoso contra Catar la semana pasada.
La joven brasileña Najila Trindade de Souza, de 26 años y que se autodefine como modelo, denunció al futbolista por una presunta violación en una comisaría de Sao Paulo, aunque la agresión se habría cometido en un hotel en París el pasado 16 de mayo.
Trindade asegura que viajó a la capital francesa a mediados de mayo para encontrarse con el jugador del París SG -quien pagó sus pasajes y hotel- con la finalidad de tener un encuentro sexual. Pero que una vez juntos, ella desistió por no tener preservativos. La denunciante afirma que en ese punto él la forzó violentamente a tener sexo.
Neymar, de 27 años, niega las acusaciones y asegura que Najila Trindade le tendió una “trampa” a fin de extorsionarlo.
Para defenderse publicó en Instagram un video reproduciendo un presunto intercambio de mensajes entre ambos a lo largo de dos meses, con fotos íntimas de la mujer, lo cual llevó a las autoridades brasileñas a abrir una investigación por difusión de imágenes privadas sin consentimiento de la persona expuesta.
Por ello, Neymar ya tuvo que declarar la semana pasada en Rio de Janeiro y se espera que en los próximos días vuelva a testificar, aunque esta vez por las acusaciones de violación.
Culebrón con tintes surrealistas
Al culebrón no le faltan tampoco detalles surrealistas, como el hecho de que tres abogados hayan dejado ya la defensa de la joven.
El primero renunció cuando Trindade presentó la denuncia por violación, ya que a él sólo le había hablado de una agresión; la segunda letrada la acompañó a poner la denuncia y poco más se supo y el tercero, Danilo Garcia de Andrade, que acaparó portadas al sacar en brazos a la joven tras salir de un interrogatorio con los investigadores, dejó el caso el martes tras ser acusado por su defendida de haberle robado una tablet en la que había una copia de un video de siete minutos del segundo encuentro con Neymar en París.
El caso ha monopolizado la atención de la opinión pública brasileña desde que se hiciera público el 1 de junio.
No es el único serial judicial que acapara portadas y horas de televisión estos días, ya que paralelamente se conocieron, según revelaciones del portal The Intercept, los contactos entre fiscales y el juez Sergio Moro, actual ministro de Justicia, en el caso que llevó al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva a ser condenado por corrupción.
Lula, que purga una pena de 8 años y 10 de meses de cárcel, siempre consideró su condena fruto de una conspiración político-judicial para impedir que la izquierda volviera al poder y ahora está a la espera de que la Corte Suprema se pronuncie sobre el pedido de excarcelación que ha realizado el exmandatario tras las revelaciones conocidas.
Los vaivenes judiciales de Neymar y Lula, dos personajes que siguen gozando de una gran popularidad en un país dividido, están provocando que los brasileños, reputados por vivir apasionadamente el fútbol, apenas estén prestando atención al torneo que se disputará en su país del 14 de junio al 7 de julio.
La prueba más clara es que apenas 16.500 personas presenciaron en directo la goleada 7-0 de la Canarinha contra Honduras en el último amistoso de preparación, el pasado domingo en el Estadio Beira Rio de Porto Alegre (con capacidad para 50.000 plazas).
Y cuatro días antes, en el triunfo 2-0 frente a Catar, el Estadio Mané Garricha de Brasilia apenas registró media entrada pese a que aún estaba Neymar (fue el juego en el que resultó lesionado el delantero del París SG).
La selección femenina, que participa en el Mundial de Francia, ha robado incluso portadas y minutos de pantalla al equipo masculino.
El seleccionador Tite asegura que el equipo, que debuta mañana contra Bolivia en Sao Paulo, está concentrado en la Copa América, pero muy bien lo tendrán que hacer los jugadores para que los brasileños dejen de interesarse por la actualidad judicial y vuelvan a enamorarse de la Seleçao, pese a que aún supura la herida por el humillante 7-1 que encajó Brasil contra Alemania en la semifinal del Mundial de 2014 disputado en el gigante sudamericano.