Alma Vilches
@AlmaCoLatino
El Comité de Familiares de Personas Presas y Perseguidas Políticas de El Salvador (COFAPPES) celebró un acto ecuménico de agradecimiento, porque el exministro de Seguridad, Mauricio Ramírez Landaverde, y el exdirector de Centros Penales, Ramón Roque, gozan de medidas sustitutivas a la detención y se han reunido con sus familias.
Desde diciembre de 2023 debieron haber salido del centro penal La Esperanza, conocido como Mariona, ya que tenían carta de libertad, pero seguían encarcelados, sin embargo, el pasado 16 de agosto fueron trasladados a sus viviendas y están en arresto domiciliar.
COFAPPES señaló que la libertad de ambos exfuncionarios es gracias a la denuncia colectiva y presión social a escala nacional e internacional. La lucha continuará para no dejarles solos durante el resto del juicio, así como a los demás presos políticos.
Asimismo, exigió el cumplimiento de la resolución judicial que desde hace 8 meses manda a poner en libertad a Jaime Valdez, Dennis Córdova y Francisco Hirezi, presos políticos desde el año 2021.
A criterio de COFAPPES, este caso es un proceso de persecución política contra ex empleados del primer gobierno del FMLN, el cual tiene por objeto dañar a las personas quienes han sido servidoras públicas de izquierda, descalificar su gestión, así como invalidarles para ejercer eventualmente, un cargo público. Además, es un ataque desde los círculos élites de la derecha hacia una fuerza política de oposición.
Asimismo, señaló que en El Salvador el gobierno de Nayib Bukele ha mantenido preso injustamente a Ramírez Landaverde, convirtiéndose así en preso político del régimen fascista.
Así como el caso de Ramírez Landaverde, hay muchos casos de presos políticos en las cárceles, sin permitir que la familia los visite, no recibir medicamentos y violentados todos los derechos humanos.
Durante declaraciones recientes en los Juzgados, Ramírez Landaverde afirmó que espera verdad, justicia y un juicio digno, pues el caso está en las condiciones que aseguraron desde 2019 cuando inició.
“En ese momento, nos pusimos a la orden de la Fiscalía, pedimos que se nos llamara que queríamos colaborar, pero nunca se nos atendió, después de aproximadamente dos años se nos emitió una orden de captura y nos presentamos, fuimos a una audiencia en la cual nos dejaron en libertad, pero un Tribunal superior revocó esa medida y nos volvimos a presentar, nos hemos puesto a disposición en todo momento”, sostuvo.
Enfatizó que son los principales interesados en aclarar el caso, pese a estar privados de libertad durante casi tres años, valió la pena porque de esa manera todo ha salido a la luz, consta en documentos y testimonios, que todos confirman lo dicho desde un inicio.
“A pesar de todo lo vivido, así como nuestras familias y seres queridos que han atravesado dolor y sufrimiento, no será en vano, porque hemos llegado a un momento en que no puede ser otra resolución contraria a nosotros, en el proceso todo está claro y tenemos la fe en que vamos a tener un fallo positivo, siempre y cuando haya una justicia digna y justa”, reiteró el exfuncionario.