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Redacción Ysuca
Desde el inicio del régimen de excepción, numerosas personas han fallecido bajo la custodia del Estado. Algunas cifras han sido reveladas gracias al trabajo de organizaciones como Cristosal, que reportó 265 muertes hasta julio de este año.
El Movimiento de Víctimas del Régimen ha registrado casos, el último de ellos el de Daniel Chávez Argueta, quien habría tenido una muerte violenta, similar a las muertes provocadas por las pandillas. Segun cuenta de MOVIR el cuerpo de Daniel “presentaba golpes en la cabeza, le sacaron los ojos, el cerebro, y otros órganos, estaba rajado de la espalda y los pies”.
Otro de los capturados en el régimen de excepción fallecido es Douglas Omar Medrano, quien murió el 17 de octubre de 2024. Según sus familiares, Medrano era alcohólico, y padecía de diabetes e insuficiencia renal. La familia fue notificada de su muerte por una funeraria que llegó a su hogar para ofrecer sus servicios.
Otro caso es el de Estanley Antonio Juárez Ramírez, quien también falleció el 17 de octubre debido a desnutrición severa y neumonía mientras estaba detenido.
Juan Saúl Castillo, por su parte, falleció 13 días después de ser liberado. Fue trasladado a cuatro hospitales públicos tras su captura, ya que padecía cáncer. A pesar de su estado crítico, no recibió la atención médica adecuada. Su familia denuncia que, durante su encarcelamiento, no le proporcionaron comida, a pesar de que ellos entregaban paquetes de alimentos mensualmente.
Otro reo fallecido en octubre es José Martin Sura , quien según MOVIR, no tenía antecedentes penales. Murió en el penal de Quezaltepeque, mientras esperaba un juicio justo y transparente. Su detención arbitraria ocurrió en mayo de 2022 en Santiago de María, Usulután.
El Socorro Jurídico Humanitario ha realizado su propia investigación, denunciando la muerte de 328 personas en diferentes centros penales del país bajo custodia del Estado. Según su informe, el penal de Izalco registra el 40% de estas muertes, el penal La Esperanza el 21% y el de Apanteos el 11%.
Ingrid Escobar, directora del Socorro Jurídico Humanitario, también ha revelado que muchas de las personas liberadas presentan graves problemas de salud. Un ejemplo es Gerber Hernández Roque, quien desarrolló insuficiencia renal tras su liberación.
De acuerdo con las organizaciones defensoras de derechos humanos, al menos 328 personas han muerto en cárceles salvadoreñas bajo la custodia de agentes del Estado, en el contexto del régimen de excepción que rige desde marzo de 2022.
Cristosal también ha informado que cuatro bebés han fallecido como resultado del régimen de excepción. Además, las muertes de adultos han dejado a 176 niños en la orfandad, y el encarcelamiento masivo ha provocado el abandono de más de 62,000 menores de 15 años.
