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Oscar López
@Oscar_DCL
Un grupo de alemanes miembros de la Juventud Evangélica de Múnich se encuentran en El Salvador, para conocer algunas de las problemáticas que afectan a los jóvenes salvadoreños, entre ellas: educación, medio ambiente, violencia y migración.
Matthias Peterhoff indicó que la visita de los jóvenes alemanes al país forma parte de una hermandad establecida con la Iglesia Luterana La Resurrección, la que inició en 1992 y desde ese año se realizan intercambios juveniles cada dos años.
“Sentimos que somos una Iglesia del mundo y queremos intercambiar cultura, ideas y nuestra realidad de vida”, dijo Peterhoff.
Durante su estadía en El Salvador los jóvenes alemanes aseguraron que dialogaron con jóvenes salvadoreños sobre algunos temas que agendaron previo a su llegada al país, entre ellos, el cuido y la protección del medio ambiente, en este caso además de platicar con sus pares salvadoreños, los europeos visitaron el lago de Ilopango en el que constataron la afectación de sus aguas debido a la basura tirada en sus orillas.
En el caso de la migración los jóvenes alemanes dijeron que ahora conocen los dos aspectos de está situación. “Hablamos sobre la migración que tenemos aquí y la que tenemos en Alemania, porque aquí es un país en el que la gente se va, pero Alemania es un país que recibe migrantes, nos permite comparar cómo es aquí y cómo es allá”, dijo Yannick Max Volb.
Los jóvenes alemanes reconocieron que en su país hay mayores oportunidades para el desarrollo, esto debido a las facilidades que tienen para cursar estudios en todos los niveles educativos. “Hay una gran diferencia en educación, en Alemania no tenemos tantos problemas en recibir una buena educación, no tenemos tantos desafíos como los salvadoreños, es más difícil terminar los estudios en Alemania”, aseguró Charlotte Volk.
Para los jóvenes alemanes la visita al país no solo cambia la forma en la que ven los problemas que afectan a otras naciones, sino también les permite tener mayor conciencia para generar cambios sociales, en sus familias y comunidades.
“En Alemania vivimos una vida segura y estamos bien acogidos, hay instituciones gubernamentales que nos ayudan, además Alemania es un país que recibe muchos refugiados y ahora tenemos una oportunidad de conocer el otro lado, eso nos ayuda a tener más conciencia para con la gente que se está yendo y podemos apreciar lo que tenemos en Alemania”, declaró Dennis Schenle.
Los jóvenes alemanes coincidieron en que este tipo de intercambios les permite “crear conciencia” entre sus connacionales, que en muchos casos no conocen la realidad de El Salvador o lo que conocen son aspectos negativos, como la violencia social, por lo que uno de sus compromisos es cambiar el concepto que se tiene en su país de la nación centroamericana.
