El Salvador puso de rodillas a Panamá sobre la grama del Cuscatlán y selló su boleto al Preolímpico de la CONCACAF.
Santiago Leiva
@DiarioCoLatino
Panamá se fue por el desagüe del Cuscatlán y volverá al “Canal” con pena y sin gloria. La armada de los Dely Valdés cayó 2-0 ante la Azulita sub 23 que, aunque a ratos evidenció falta de oficio, logró concretar dos opciones y visar su boleto al Preolímpico de la CONCACAF.
La justa, que también tendrá como invitados a México, Estados Unidos, Canadá y Costa Rica, se celebrará en tierras norteamericanas en los próximos meses y repartirá los boletos a los Juegos Olímpicos Tokyo 2020.
El partido
La selecta juvenil le sacó petróleo al empate (1-1) conseguido en el Rommel Fernández, le tiró la presión a la visita y logró sentenciar la serie 3-1.
Y es que el urgido sobre el césped del estadio Cuscatlán era Panamá, pues a El Salvador le bastaba cerrar el partido con la pizarra en blanco para sellar su boleto y esa comodidad, a la postre, privó de ver el talento de muchos jugadores que integran la selecta cuscatleca.
No se desbocó inicialmente la armada de Memo Rivera y eso permitió que los canaleros cogieran el control del partido, dominaran la pelota y pusieran en aprietos al meta Mario González, que tuvo que sacar sus reflejos felinos para evitar el gol en la portería salvadoreña.
En el primer acto, Panamá fue amo y señor del balón en la zona ancha y eso provocó faltas en demasía por parte de los azules, que únicamente tuvieron como vía de escape la velocidad de Ezequiel Rivas por el corredor derecho.
Por el carril izquierdo, mientras tanto, Kevin Reyes fue un fantasma y en el frente de ataque Bryan Paz apenas tocó la pelota. Pese a ello, El Salvador consiguió irse a las duchas con ligera ventaja de 1-0. La anotación llegó por la vía del penalti; ya que, al ‘24, Marvin Aranda se escapó por derecha y fue derribado en el área. Frente a la pelota se paró Andrés Hernández, quien colocó el 1-0 al minuto 26.
Hasta ahí, El Salvador solo había tenido una oportunidad por medio de Josué Rivera, mientras que Panamá ya había inquietado varias veces a González.
Al ‘13, por ejemplo, Isidoro Hinestroza le había quemado los guantes de González y, al ‘34, el mismo Hinestroza volvió a probar los reflejos del meta salvadoreño desde el tiro libre.
Los últimos diez minutos se jugaron en el área salvadoreña, pero no pudo la visita conseguir el tanto de la paridad.
En el segundo tiempo, El Salvador se atrincheró en su parcela para especular con el contragolpe, lo que provocó que los canaleros tuvieran salida despejada y manejaran la posesión de balón, pero sin llegadas claras.
Y fue bajo esa estrategia que la Azulita tuvo para el 2-0 al ‘62, pero Kevin Reyes terminó rematando desviado frente al portero.
Quien no falló fue Boris Morales, el exjugador chalateco aprovechó un gran centro desde la derecha para pillar a la defensa panameña y colocar el 2-0 en el 90+1. Tanto que sentenció definitivamente la eliminatoria.