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Ángel Ibarra, salve Presidente de la Unidad Ecológica Salvadoreña (UNES), afirmó que para los terremotos del 13 de enero y 13 de febrero del 2001, el ex presidente Francisco Flores “privatizó la gestión de emergencia y junto con la empresa privada manejaron de una manera oscura los donativos millonarios de la comunidad internacional”.
“Yo creo que son más de $10 millones, porque a Paco Flores le tocó manejar la reconstrucción que dejó el huracán Mitch, donde El Salvador solicitó en Estocolmo $1,200 millones.
También para los terremotos de 2001 presentó demandas por $800 millones a la comunidad internacional. Habrá que investigar si ese dinero vino o no, pero todo esto es de lo más oscuro que ha habido en este país”, dijo el representante de la UNES durante la entrevista Agenda Ciudadana que transmite Televisión de El Salvador (TVES) a las 8 de la noche.
El ex presidente Francisco Flores no ha rendido cuentas de un millonario donativo que recibió de Taiwán, el cual dijo que habría solicitado para ayudar a las víctimas del deslave en la colonia Las Colinas de Santa Tecla. “Yo recuerdo que pasaron censo en el que dijeron que nos entregarían ayuda, pero nunca recibimos nada, y la mayoría de los residentes, incluso los afectados directos de Las Colinas, no recibieron ayuda alguna”, aseguró Lourdes de Campos, integrante de la Junta Directiva de la colonia Las Colinas, quien también participó en la entrevista Agenda Ciudadana.
Diferentes organizaciones sociales han exigido una investigación a profundidad y que deduzca responsabilidades sobre el presunto acto de corrupción por parte de uno de los presidentes honorarios del partido ARENA y asesor del candidato presidencial Norman Quijano.
“Lamento que se hayan aprovechado del dolor y el sufrimiento de las víctimas y que la ayuda internacional no llegara directamente a las personas que en verdad la necesitaban, y que aún la necesitan, porque aún existen afectados que no han resuelto el problema de vivienda”, afirmó Lourdes de Campos.
Cabe destacar que en materia de prevención de riesgo, Ángel Ibarra manifestó que todo ese monto millonario “desaparecido” podría haber sido utilizado para realizar estudios y diseñar estrategias de prevención ante posibles desastres.