Mirna Jiménez
@DiarioCoLatino
El director de la Academia Nacional de Seguridad Publica, Jaime Martínez, manifestó ayer que el principal logro en estos diez años de su gestión al frente de esa institución, ha sido la transformación de la entidad en un instituto especializado, que mejora la calidad de formación de los alumnos.
“Hay que recordar que las primeras promociones en la academia se formaron en cinco meses o seis meses, por eso es que en los primeros dos o tres años de funcionamiento eran promociones masivas que buscaban responder a la coyuntura”, explicó Martínez.
El funcionario señaló que una de las modificaciones en la formación de los futuros policías que se implementó, con base a un diagnóstico elaborado por expertos españoles, fue la de reducir el ingrediente militar en la Academia. “Claro que se veía esa formación (militar) desde la Academia, en los ritos, en los procedimientos que se seguían para formar a los policías casi como soldados, el régimen casi cerrado que existía, donde no había un espacio de libertad para el ejercicio del pensamiento ciudadano de los estudiantes”, explicó.
Se han incorporado además tres grandes ejes filosóficos a la formación de los alumnos de la ANSP, dijo Martínez, como son: policía comunitaria; derechos de los jóvenes y justicia penal juvenil; y teoría de género y derechos de las mujeres.
Martínez, añadió que la formación técnica para combatir a la delincuencia en el terreno es la que han tenido que ir adecuando en estos diez años, según las coyunturas de violencia.
“Siempre habían estado preparados, para decirlo de esta manera, para cierto volumen de criminalidad, pero cuando los mismos policías se volvieron objeto, blanco de grupos criminales, de ataques armados, especialmente desde 2014, pues tuvo que hacerse un énfasis mayor en la formación”, explicó.
En el caso de la Policía Nacional Civil, hubo la necesidad de formar grupos especializados en la búsqueda, la detección y de ser necesario también del enfrentamiento de estas estructuras criminales armadas”, añadió Martínez.
El funcionario afirmó, por otro lado, que la presencia de las pandilla en muchos lugares hace más difícil la selección de candidatos a policías, en muchos casos debido a las amenazas de los pandilleros contra los aspirantes o sus familias.
Además se lleva a cabo una estricta revisión de los candidatos, para evitar la infiltración de personas que tengan vínculos con pandilleros y en diez años se han encontrado alrededor de sesenta casos. Martínez, dijo que El Salvador es uno de los países con mayor promedio de agentes policiales por habitante, con una media de tres por cada mil.