Tomada de EL PUNT ABUI
Jordi Planas Bosch, activista de la Agenda Latinoamericana repatriado desde América Central, estuvo confinado tres semanas en la capital de El Salvador por las medidas impuestas por el gobierno y el presidente Nayib Bukele en prevención del coronavirus que hoy asola a Europa.
¿PARA qué fue en Centroamérica?
A través de la Agenda Latinoamericana Mundial, coordino una campaña de educación popular en valores humanos en Cataluña. Una de las Acciones es un viaje de ida y vuelta, que está enfocada a cambiar experiencias, buscar soporte y sinergias, casi cada año me toca viajar algún país de Latinoamérica.
¿Qué se encontró?
Se mantienen unas grandes desigualdades lo que genera mucha violencia, poco futuro y una gran ansiedad. Jóvenes y familias enteras deciden emigrar. Tanto pueden ir a Europa como los Estados Unidos. En el último caso y como se ha visto en los noticiarios internacionales, esto ha provocado largas caravanas de Inmigrantes que huyen, que no son sino un mecanismo de defensa ya que así se sienten acompañados y no dependen de la explotación de los «coyotes».
¿Cómo se ha llegado a este punto?
Las causas son muy diversas. Por un lado tenemos la herencia del colonialismo que ha hecho que la oligarquía domine la economía de muchos países, además existe la irrupción del neoliberalismo, que defiende el capitalismo salvaje y ha sabido encontrar en determinadas sectas evangélicas una llave de dominio de una parte de las clases más desfavorecidas.
¿Qué se ha hecho en El Salvador para superar la crisis del coronavirus?
Creo que han tomado Medidas oportunistas. Personalmente me es difícil de creer que el gobierno liderado por Nayib Bukele, un empresario que en 10 meses ha deteriorado el sistema de salud, – ha recortado 33,5 millones de dólares de los Presupuesto del Ministerio, eliminó programas sociales y económicos que beneficiaban a la población de menos recursos, especialmente la salud de las mujeres. Bukele está en contra del Aborto terapéutico, y de las Parejas del mismo sexo, ha aumentado el Gasto militar, provocado el desabastecimiento del agua y grandes ciudades las encontramos que el 80% de sus habitantes no pueden acceder, ha despedido a los técnicos institucionales que no eran de su color. Hace un mes y medio militarizó el parlamento. Lo ocuparon policías, militares con armas de gran calibre, chalecos antibalas y cascos. Todo para exigir a la banca internacional 109 millones de dólares. Ahora y después de las declaraciones que ha hecho, se me hace muy difícil pensar que este hombre se ha girado como un calcetín.
¿Qué quieres decir, que los normas aplicadas por el gobierno al coronavirus no eran los más acertadas?
No me atrevo a decir si eran acertadas o no, se habla de suspender durante tres meses el pago de las facturas de agua, luz o teléfono, o la paralización de las hipotecas, y se prohíbe que la gente salga a la calle, pero la realidad es otra, en el país hay un 35% de la población en condiciones de pobreza, y es difícil que la gente se pueda quedar en casa porque hay un 22% que no tiene un hogar digno, quiere que la gente se lave las manos pero el agua es un monopolio y muchos no la poden pagar. Además hay toda la problemática de los vendedores y la gente que vive en la calle y debe hacer las mil y una para no morir de hambre o desesperación. Qué pueden hacer ante la pandemia?. Es elemental, proteger a los más pobres con un Ingreso básico universal de emergencia.
¿Parece ser que para enfrentar la pandemia en EEUU plantean una renta básica?
En EEUU están viviendo una curva de desigualdad extrema. Trump se ha cargado los sistemas de protección oficial que había puesto en marcha Obama, y ahora se encuentra que la pandemia ha estallado y no hay una sanidad pública digna que pueda aguantar el sistema y es por esto que alguien ha planteado que si no se impone una renta básica, fallará una de las claves de la economía, no habrá consumo y el caos lo hará reventar todo. No deja de sorprende que delante una una complicación extrema como esta el FMI recomienda que se perdone la deuda a los países empobrecidos y el sistema capitalista, sin entrañas, lo plantee como una puesta de futuro.
¿Quizás el coronavirus llevará algo positivo?
El coronavirus nos hace conscientes de nuestra extrema vulnerabilidad y es por esto que creo que si no hay una respuesta coordinada y sincronizada entre a los estados, el virus irá ganando terreno. Únicamente nos puede ayudar a superarlo con la conciencia individual la cooperación internacional a gran escala y el conocimiento científico. Por otro lado, Debemos estar contentos por la experiencia colectiva, ya que han generado muestras de verdadera solidaridad, se ha demostrado que la sanidad pública es uno de los pilares sobre a los que se aguanta nuestra convivencia y nos hará ser más empáticos, ya que la mayoría hemos tenido que encontrar nuevas formas de trabajo, de consumo y de relaciones humanas. Todo hace pensar que las flores sembradas están a punto de brotar!. Como dijo Monseñor Romero, asesinado hace cuarenta años «No podremos Avanzar sino se cambia el sistema».