Caracas/PL
El alcalde del municipio Libertador, generic Jorge Rodríguez, entregó el lunes las Llaves de Caracas al antiterrorista cubano René González, quien llegó hoy a esta capital invitado por el gobierno venezolano.
Vengo a agradecer en nombre de Los Cinco -como se conoce al grupo de antiterroristas condenados en Estados Unidos- todo el apoyo recibido de Venezuela en nuestra lucha y porque se haga justicia, con el compromiso de luchar por nuestros hermanos hasta que estén de regreso en casa, declaró González, tras depositar una ofrenda floral a El Libertador Simón Bolívar, en la Plaza que lleva su nombre.
René González y Fernando González fueron liberados tras cumplir la totalidad de injustas condenas, en tanto Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero permanecen confinados en cárceles federales de Estados Unidos.
Sobre la acogida tributada, consideró que «el calor humano es abrumador, en eso nos parecemos cubanos y venezolanos» y comparó más adelante que «como caribeños tenemos esa capacidad para dar cariño y recibir al visitante que viene como amigo».
La jefa de Gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Farías, dio la bienvenida a Caracas a González y a su esposa, Olga Salanueva, en nombre del presidente Nicolás Maduro, quien desde su puesto de canciller de Venezuela fue líder en la defensa de la causa de los antiterroristas cubanos, apuntó.
Visita que consideró un honor pues permite palpar el «ejemplo de la resistencia del pueblo cubano», y nos da más fuerza en este momento de segundo intento de golpe de la ultraderecha empecinada en destruir a nuestra revolución, acotó Farías.
Al respeto René González dijo que la solidaridad con la causa del grupo ha sido no solo una fuerza espiritual sino también material en las condiciones de confinamiento.
Destacó como importante la cantidad de cartas enviadas de todas partes del mundo, incluida Venezuela, la cual «concede fortaleza dentro de la población penal, nos eleva ante ellos aprenden a respetar a Cuba cuando ven tanta correspondencia procedente de tantos países», apuntó.
En declaraciones a Prensa Latina, González señaló que con el fallecido presidente Hugo Chávez, a quien rindió tributo en el Cartel de la Montaña, más que una deuda tenía una obligación, por eso, dijo, «pedí que fuera el primer lugar que visitáramos».
Tuve el privilegio de conversar con él cuando estuvo en La Habana -recordó- y yo estaba allí cuando mi libertad supervisada, «conversamos como dos revolucionarios, como dos viejos soldados, pero sobre todo como dos seres humanos cuyos corazones laten por lo mismo».
Rememoró también que en ese poco tiempo «hicimos una comunión, el me invitó a venir a Venezuela y en ese entonces soñamos con la posibilidad de montarnos en un tanque, porque ambos fuimos tanquistas, también fuimos paracaidistas».
Yo le debía esa visita a Chávez, apuntó, por todo lo que representó él para Los Cinco.
Era un deber recordar sobre su tumba que él siempre va a estar con nosotros y con América Latina hasta que seamos la nación que quería Bolívar, expresó González.