Rebeca Pineda
@DiarioCoLatino
Las abejas son consideradas en el mundo como las polinizadoras número uno, si ésta desaparecieran el medio ambiente sufriría un desequilibrio; además de ser tan vitales producen la deliciosa miel que es parte de la dieta de miles y es utilizada como medicina.
Silvia Sanz de 52 años proveniente de Jocoaitique, Morazán conoce muy bien estos beneficios, pero también ha descubierto que se puede sobrevivir de la miel que producen estos pequeños insectos.
“Yo ya tengo más de veinte años de ser apicultora, me ha gustado participar y capacitarme más que todo en participar en el área comercial e ir mejorando la presentación de mis productos derivados de la colmena, por ejemplo la diversidad de la línea alimenticia y cosmética”, afirmó.
En El Salvador aproximadamente 1 mil 100 productores de miel salvadoreños y nicaragüenses se beneficiaron a través del proyecto regional: Fomento de la Competitividad para una Apicultura sostenible (FOCAPIS) y presentaron los resultados de la apicultura, que fue ejecutado por Swisscontact y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con el lema “Avanza Apicultor”.
“Hoy es un día muy especial para nosotros y estamos muy contentos de compartir los resultados, hemos estado trabajando con Swisscontact y nosotros como Banco Interamericano de Desarrollo y ha sido un proyecto de dos millones de dólares, un millón por cada una de las instituciones”, indicó Carmiña Moreno representante del BID en El Salvador.
Moreno explicó que en el proyecto se abordaron cuatro temas importantes: fortalecer la asociatividad del sector, apoyar la profesionalización de los trabajadores, mejorar la competitividad y ayudar a tener mayores valores agregados en la producción de miel.
En este sentido Enrique Cabrera delegado del ministro de Agricultura y Ganadería manifestó que: “este Gobierno va a estar apoyando a todas y todos los apícolas y de otros sectores, quiero animarles a que sigamos trabajando en ese ámbito”, dijo.
FOCAPIS se desarrolló entre los años 2016 y 2019 dando como resultado el incremento de la productividad y competitividad en el mercado internacional, superando la caída de las exportaciones del 2016 y 2017.
Asimismo se organizó la Mesa Nacional Apícola de El Salvador, que impulsó la Política Nacional Apícola para la regulación de los mercados; se generaron 782 empleos, se crearon dos apiarios modernos uno en Morazán y otro en la Escuela Nacional de Agricultura (ENA) y se creó la primera formación de posgrado en esta área, así como diversos programas de estudio para fortalecer el sector.