Proyecto Cultural Sur Vancouver
Juan Joaquín Pérez Tejada Domínguez
15 de marzo a las 11:24
Entregaremos esta carta hoy en la embajada de Guatemala, ¿te sumas?
Ciudad de México, a 15 de marzo de 2017.
Al Presidente de Guatemala:
Con enorme consternación nos enteramos de los lamentables sucesos ocurridos el ocho de marzo en el “Hogar Seguro, Virgen de la Asunción”, orfanato ubicado en San José Pinula, en el que viven hacinadas ochocientas personas entre bebés, niñas, niños y adolescentes.
No nos explicamos cómo pudo llegar a suceder una tragedia en la que perdieron la vida quemadas —una de las peores formas de morir— cuarenta niñas y adolescentes. No podemos entender cómo pudieron encender un colchón y nadie, ningún adulto responsable, haya acudido a apagarlo y a dialogar con las niñas para entender sus motivos. No entendemos cómo nadie, ningún adulto era capaz ahí de salvaguardar la vida, la integridad y el sano desarrollo que todos los menores requieren para convertirse en las mujeres y los hombres capaces, talentosos y amorosos que este mundo cada vez más complejo requiere. No entendemos.
No entendemos cómo era posible que el abuso sexual se diera en los salones de clase sin que hubiera ninguna vigilancia, sanción, auxilio a estas niñas y niños obligados a desnudarse, a practicar sexo oral. No entendemos cómo las niñas podías ser violadas, embarazadas por sus compañeros, maestros, policías y otros adultos que lejos de velar por su seguridad se aprovechaban de su desamparo. No entendemos.
No entendemos dónde estaba la responsabilidad del gobierno de Guatemala que desoyó los gritos de las niñas calcinadas, que desoyó sus protestas por tantos abusos indignantes, que desoyó a los periodistas, que desoyó las muchas quejas de los vecinos que desde afuera se daban cuenta del tamaño de ese infierno que irónicamente se llama “Hogar seguro”.
No entendemos cómo el desprecio puede llegar tan lejos. No entendemos cómo se las arreglaron para repetir, distancias guardadas, el incendio provocado por la patronal de la Triangle Shirtwaist Company en 1911 quien asesinó a 146 mujeres, de entre 14 y 32 años. Pues igual que ustedes encerraron a las niñas, la empresa cerraba con llave la puerta de salida de la fábrica. Al incendiarse las naves, las obreras quedaron atrapadas muriendo carbonizadas o estrelladas en la calle después de arrojarse por las ventanas, en el salón del Hogar Seguro ni siquiera había ventanas.
Condenamos al gobierno genocida, feminicidio, infanticida de Guatemala por su omisión e infinita indiferencia por las personas por quienes debería velar. Exigimos justicia para las cuarenta niñas y adolescentes quemadas y para los ochocientos niños y niñas que viven en un orfanato que en nada se distingue de las peores cárceles, expuestos a torturas, abusos sexuales, privación del alimento y hasta del derecho de ir al baño.
No es suficiente procesar a un par de funcionarios para acallar la indignación mundial por este infanticidio ya que se trata de un problema estructural que exige una revisión seria, responsable y profunda que garantice que nunca más se abusará de una niña o niño resguardado en un hospicio de Guatemala.
Si usted no puede garantizar eso, si tan incompetente es, señor Jimmy Morales, renuncie a su puesto y abra paso a una persona capaz y sobre todo, una persona con un mínimo de humanidad que estructure un sistema de apoyo a la niñez digno y eficiente.
Maya López
Vanesa Dri
Marco Noguez
Nadia García
Verónica Rodríguez
Por el Pc-sur Veracruz, Jaime Velásquez
Por el Pa-surv , Lucy Ortiz