Alma Vilches
@AlmaCoLatino
Especialistas capacitados ayudan a las familias albergadas a gestionar sus emociones y sentimientos en este momento de crisis que afrontan, así lo afirmó la ministra de Educación, Carla Hananía, quien verificó en el Centro Escolar República de Honduras de la colonia IVU en San Salvador y el Centro Escolar cantón El Majahual en el departamento de La Libertad, el apoyo psicosocial y atención a la primera infancia que reciben las personas afectadas por la tormentas recientes, Amanda y Cristóbal.
La funcionaria detalló que la atención psicoemocional consiste en llevar un alivio con jornadas de tres días, que inicia con la expresión de las emociones y desahogo, posteriormente una atención más directa a cada uno de los casos, con el objetivo de ayudarles a comprender la situación que están viviendo y minimizar traumas a futuro.
“En el caso de los niños hay una dificultad para expresar las emociones, nuestros niños, nuestras familias tienen en este momento un doble trauma, y tenemos que atender ese trauma porque si no se procesa eso es una posible incubación de futuras enfermedades psicosomáticas, enfermedades crónicas que a veces no se le encuentra una causa, y son muchas veces de origen emocional que han sido acumulados en eventos donde a los niños no les han dado la posibilidad de expresarse”, sostuvo Hananía.
Según la titular de Educación, hay cerca de tres mil niños y adolescentes en 82 centros educativos públicos, habilitados como albergues a nivel nacional, quienes además de proporcionarles alimentos, también reciben atención educativa y de salud; cada albergue cuenta con un Programa de Atención en la Primera Infantil (ATPI) y dos psicológicos de las Consejerías Escolares, además, han sido abastecido con colchonetas, frazadas, implementos de primera necesidad y alimentos.
“Estamos cubriendo con ayuda psicosocial a los niños y adolescentes en todos los albergues, no solo en los que están en centros educativos. Con los organismos de administración escolar se decidió poner a disposición los alimentos que se encuentran en los centros escolares, para que las personas albergadas tengan sus tres tiempos de comida”, manifestó.
La ministra de Educación informó que por el momento se contabilizan más de 200 escuelas dañadas por las lluvias, entre las principales afectaciones están los taludes, paredones y muros de contención que ponen en riesgo a las personas. Para reparar los primeros 180 centros escolares reportados se había calculado como mínimo cinco millones de dólares, sin embargo, esa cantidad podría elevarse, pues cada día se notifican nuevos daños a la infraestructura educativa.