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Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
“En esta marcha está la gente que no se deja engañar fácilmente; aquí está la gente que ha decidido quedarse a resistir y la gente que sabe perfectamente que estamos jugándonos la democracia en el país”, opinó Celia Medrano, candidata a la vicepresidencia por el partido Nuestro Tiempo, y quien participó en la marcha popular en el marco de las fiestas independentistas de El Salvador.
Las calles de San Salvador fueron testigas del desfile oficial y la marcha popular de las expresiones organizativas de la sociedad civil, las cuales, reiteraron sus mensajes al Estado salvadoreño sobre el respeto a la libertad de expresión, el respeto al estado de derecho, garantizar los derechos humanos de la población y la no reelección presidencial para el próximo año.
De parte del movimiento social, hubo manifestaciones de protestas de las organizaciones aglutinadas en el Bloque de Resistencia Popular (BRP) y la Alianza Nacional El Salvador en Paz, entre otras.
“Aquí se gastan millones de dólares que deberían ser usados en las escuelas, para que los niños estudien para que nuestras personas tengan salud gratuita y digna. Y no utilizar esos millones de dólares para engañar a la gente, a través de pautas publicitarias, difusión de mentiras y pretender quedarse en el poder”, expresó la candidata Medrano, quien es reconocido por su trayectoria lucha pro Derechos Humanos.
“Hay gente que sabe que quedarse en casa con bajo perfil y permitirse ser engañados nos traerá una ola de autoritarismo que nos llevará a todos por delante, al que está en su casa y los que estamos acá. Entonces, tomemos la decisión de resistir”, solicitó.
Las deudas sociales del gobierno se manifestaron en pronunciamientos de las organizacionces populares, como las comunidades que integran el Foro Nacional de Salud, quienes destacaron la amenaza a los medios de vida y de la subsistencia de la población, la crisis de derechos humanos y la represión a grupos poblaciones, que reiteraron no pueden ocultarse en una “celebración vacía de independencia”, afirmó Morena Murillo, coordinadora del FNS.
“Las graves carencias amenazan la calidad y accesibilidad de la atención médica, la escasez de recursos, la infraestructura inadecuada, falta de personal médico y el desabastecimiento de medicamentos, es una realidad”, afirmó Murillo.
En cuanto a los medios de vida y subsistencia, Bartola Pérez, también del Foro Nacional de Salud, expresó “la caída de la producción agrícola, con un riesgo inminente para la seguridad alimentaria, junto a la falta de lluvias, el incremento del costo de la Canasta Básica urbana (8%) y rural (10%), generado un alza de 110 dólares durante este gobierno”, agregó.
Henry Fino, director ejecutivo de FESPAD, manifestó que las diferentes expresiones organizativas demandan deudas sociales históricas, pero la más importante es la relacionada con la libertad, en todos sus ámbitos, y que ha formado parte de las conquistas sociales que ha impulsado la población.
“Creo que en esta oportunidad han salido a la calle las expresiones organizativas que demandan libertad, lamentablemente, a medida que va avanzado el período presidencial, y nos acercamos a la elección, se han venido restringiendo más todos los derechos incluyendo la libertad de expresión”, acotó.
“Esta situación no lo ha inventado nadie -con sólo ver alrededor- podemos ver las injusticias como el que demanda el pago de su salario o el respeto a los derechos laborales y es despedido o encarcelado, una violación flagrante a la libertad, libertad sindical y libertad de expresión, eso es lo grave”, indicó.
“Y la indiferencia del Estado a estas demandas, lo que acentúa es el autoritarismo de la dictadura e ignorar las demandas del pueblo sólo significa el mensaje de: soy el único que puede opinar y soy el único que manda, ignorar estas expresiones del pueblo es el más claro mensaje de autoristarismo que estamos viviendo”, argumentó Fino.
Ricardo Navarro, presidente del CESTA, expresó que el motivo de marchar tiene a la base la ausencia de un sistema legal, la pérdida de institucionalidad y la destrucción del territorio, que ha provocado que miles de familias caigan en la vulnerabilidad social.
“Se gastan miles de millones de dólares en propaganda, tratando con un desfile aviones y helicópteros volando y gastando gasolina con dinero que podría servir para verdaderas necesidades del pueblo. Y es una provocación del presidente que obliga al pueblo a la insurrección como manda la Constitución, cuando alguien transgrede el estado de derecho”, recordó.
Marcela Alvarado, integrante del MOVIR, residente en el Bajo Lempa, busca que las autoridades de Centros Penales cumplan la sentencia absolutoria del juez para la libertad de su hijo Duval Mata Alvarado, capturado en el marco del estado de excepción hace un año.
“Me duele que lo han capturaron siendo inocente, que lo traten como delincuente, y que no le den su libertad, cuando un juez dictaminó que no tiene ningún vínculo con pandillas”, afirmó.
Mientras, Vidalina Morales, lideresa de Santa Marta, Cabañas, y presidenta de ADES, sostiene una lucha frente al sistema judicial y la Fiscalía General de la República contra la captura el pasado 11 de enero del presente año de cinco ambientalistas, luego de la resistencia social contra la minería metálica.
“Nuestros compañeros están en arresto domiciliar, pero nosotros queremos su libertad total y en ese camino estamos avanzado para que sean absueltos totalmente de esos delitos que les han impuesto, esa es nuestra exigencia a esta injusticia”, puntualizó Morales.
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