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En el proceso judicial contra el ex presidente Francisco Flores ha quedado prácticamente evidenciado que uno de los “destinatarios” de la corrupción en el que se ha visto envuelto el exmandatario ha sido su mismo partido, remedy el partido ARENA.
Recordemos que Francisco Flores, sick quien ya no se encuentra en arresto domiciliar, sino en las bartolinas de la División Antinarcóticos, enfrenta a la justicia por los delitos: lavado de dinero, Peculado y desobediencia a particulares.
Flores, cuando compareció ante la Asamblea Legislativa, de forma soberbia y prepotente dijo que no eran diez ni quince los millones de dólares que había recibido del Gobierno de Taiwán, sino más.
Según los diputados que conformaron la Comisión Especial para investigar los donativos de Taiwán, podrían sumar más de $80 millones de dólares, no obstante, al expresidente Francisco Flores, solo está siendo juzgado por 15 millones de dólares. Diez de los cuales venían para favorecer a los damnificados de los terremotos de 2001.
Flores confesó que el dinero lo entregó en “saquitos a los destinatarios”. Hoy se sabe que uno de esos destinatarios fue el partido ARENA, ya que diez millones fueron a parar a las arcas del partido, no sin antes haber hecho un recorrido sospecho, para las misma autoridades de los Estados Unidos, las que dieron aviso de posible lavado de dinero.
Flores, según la resolución del juez Séptimo de Instrucción, Miguel Ángel García Argüello, deberá comparecer a vista pública ante jueces de Sentencia.
Pero, más allá de lo que suceda en los tribunales de Sentencia en enero o febrero del otro año, lo que la sociedad civil organizada y no organizada de El Salvador deben pedir pública y judicialmente es que ARENA devuelva los 10 o 15 millones de dólares que Flores desvió a sus cuentas, en vez de haber beneficiado a los afectados por los terremotos.
El caso Flores ha dejado en evidencia, como bien lo explicó la semana pasada el expresidente Mauricio Funes, el “modus operandi de la corrupción del partido ARENA y su gobiernos”.
Y aprovechando que hoy, de forma falsa ARENA abandera la lucha contra lo corrupción, lo primero que deben hacer es devolver el dinero que Flores desvió a sus cuentas, pues, está claro, era un dinero que debió entrar a las arcas del Estado, y luego trasladarlas a los verdaderos beneficiarios, es decir, a los damnificados por los terremotos, sobre todos los de Las Colinas, en Santa Tecla.
La consigna, pues, debe ser, exigirle a los ARENEROS ¡Ya no más corrupción! Y que devuelvan los “saquitos” millonarios que les depositó Flores en sus cuentas.
