@elder_gomez_2
La derechista ARENA, try derrotada en las urnas en tres ocasiones consecutivas por el ex guerrillero FMLN, view desde 2009, advice buscará el mea culpa en un congreso que, más allá de analizar la actual coyuntura política, enviaría al despeñadero a importantes figuras que condujeron la reciente campaña electoral, bajo el manto de una “democratización interna” de esa formación política.
La otrora primera fuerza política de El Salvador, que durante 20 años consecutivos gobernó los destinos de este país centroamericano, se enfrenta ahora ante la disyuntiva de cambiar de tajo su estructura partidaria, incluidos sus estatutos, para dar paso a nuevos valores políticos de cara a los comicios municipales y legislativos de 2015, y de descentralizar sus ingresos financieros, concentrados hasta ahora en un pequeño sector oligárquico.
ARENA, fundada en 1981 y que aún preserva un himno político que invita a la lucha contra el comunismo, está ahora al borde de una “modernización” que podría ser traumática para algunos sectores ultraconservadores que durante decenios han pululado en el interior de esa fuerza política con voz y mando, y que en la actualidad se enfrentan a voces que claman “cambios”.
Los “cambios” en el interior de ARENA, propuestos a golpes de duros reveses electorales, empujarían al surgimiento de una nueva dirigencia partidaria inclusiva, en la que podrían estar representados los ocho sectores que integran ese partido político de derecha, que podrían ser propuestos en un congreso previsto a celebrarse dentro de 15 días.
“ARENA está dando visos de renovación, no de rebelión”, aseguró el diputado David Reyes, uno de los representantes de las voces jóvenes de esa formación política quien también clama porque el financiamiento de ese partido político “debe abrirse más” y no estar centralizado en grupos hegemónicos.
“Creo que este es el momento más oportuno para comenzar a hablar de temas que son muy relevantes para nuestro partido, de una democratización interna, no solamente de cargos dirigenciales y de estructura, sino a la hora de elegir a los candidatos que van a un cargo de elección popular”, explicó el legislador, quien consideró “positivo” que en ARENA se lleven a cabo elecciones internas para ello.
Reyes consideró oportuno que en ARENA se hable de “cambios, porque nos hemos dado cuenta de lo necesario que es modernizarnos… de darle voz a todas las estructuras, de una democratización interna…Probablemente sea importante hablar de relevos”.
La también legisladora de ARENA, Ana Vilma de Escobar, no descarta que el “cambio” de los actuales miembros del Consejo Ejecutivo Nacional de ARENA (COENA), sea propuestos por las “bases” durante el congreso previsto dentro de dos semanas.
“Hay que hacer modificaciones y renovaciones en el partido en general para acercarnos más a lo que la gente nos está pidiendo”, aseguró la parlamentaria, quien trajo a cuenta los 500 mil votos que su partido político acaparó súbitamente en la segunda ronda de las elecciones presidenciales del 9 de marzo, ganadas por el izquierdista Salvador Sánchez Cerén. “Cuando me platean las preguntas si estamos fallando o no, tengo mis reservas de contestar, porque toda institución necesita una renovación constante, estructural”, aseguró de Escobar, quien cuestionó la Ley de Partidos Políticos aprobada por el congreso, porque “no tuvo el alcance suficiente para lograr la modernización de los partidos”.
Al igual que Reyes, la diputada de ARENA dijo que su instituto político “tiene que abrir los espacios para nuevas personas que se incorporen al partido, apoyos, afiliados, para fortalecer la capacidad de ser una oposición más fuerte”.
Dijo que el conocido apoyo financiero por parte de empresarios y de la oligarquía salvadoreña a ARENA, es un “mote”, aunque declinó comentar si ello es una “injerencia para que (los empresarios) manden”.
Sobre el resultado adversos de en los pasados comicios, de Escobar reconoció que “algo hicimos mal y algo hicimos extraordinariamente bien”.
“Entonces, capitalicemos sobre lo que hicimos extraordinariamente bien y mejoremos lo que hicimos mal”, razonó.