Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“Es muy lamentable ver a nuestros funcionarios, de los tres poderes del Estado, enfrentados, luchando por sus propios intereses, atacándose mutuamente, sin ponerse de acuerdo para enfrentar a la pandemia; es momento de estar unidos -como conviene hacerlo-, para que sea efectiva la defensa de la vida y la salud de los salvadoreños. Pues ese es el deber del Estado, como lo expresa la Constitución Política de nuestro país”, señaló en su mensaje dominical el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas. El jefe de la Grey Católica metropolitana reaccionó así, al contextualizar que el mundo y el país se encuentran viviendo una “terrible historia por la pandemia del COVID-19”, que ha generado miles de fallecidos y con más de 4 millones y medio de personas que sufren la enfermedad del coronavirus y más de 300,000 fallecidos.
“Se trata de un virus, que es sumamente contagioso, incluso, a veces el transmisor es una persona “sana” (porque no presenta síntomas) posiblemente ni se da cuenta que tiene el virus y lo trasmite también sin saberlo. Además, es un virus que ataca de distintas formas y que, asociado a otros virus o enfermedades, se vuelve sumamente mortal. El mundo ha sido sorprendido con tan terrible mal y los distintos gobiernos hacen muchos esfuerzos por detener su avance, algunos países tienen mejores resultados que otros; pero todo el mundo está sufriendo tal situación pandémica”, observó.
En cuanto a El Salvador, el arzobispo Escobar Alas señaló que el país reporta en la actualidad 1,320 personas a las que se les ha confirmado que padecen la enfermedad del COVID-19 y 30 personas fallecidas, y están aumentado los casos sospechosos de contagio, además, según datos estadísticos contagiadas se va a una curva ascendente, que es la etapa más crítica del ataque de la enfermedad, por lo que las medidas de prevención deben ser efectivas y acatadas por toda la población.
“Nuestras autoridades sanitarias han anunciado que ya están llenas las unidades de cuidados intensivos y que el sistema hospitalario está a punto de colapsar. A ustedes queridos hermanos y hermanas quiero animarles a no tener miedo y hacer frente a esta situación con la confianza puesta en Dios y actuando en lo que nos corresponde, concretamente recomiendo que oremos mucho, como nos lo ha recomendado el papa Francisco. Pidamos a Dios intervenga en favor de nuestro pueblo, y tomar las medidas sanitarias y de protección necesarias para evitar contagiar a nuestros hermanos y a la vez evitar ser contagiado”, expresó.
Mientras a los gobernantes les pidió hacer el trabajo que les corresponde y de manera coordinada desde las facultades, obligaciones y responsabilidades que le compete a cada poder del Estado. “Oremos para que Dios dirija a nuestros gobernantes y a cada uno de nosotros, para que todos hagamos lo que nos corresponde. Como Iglesia les hemos llamado y les seguiremos llamando al diálogo y a la mutua colaboración para que unidos salgamos adelante superando de la mejor forma la pandemia”, puntualizó.