Yanuario Gómez
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Con la finalidad de conmemorar el vigésimo octavo aniversario la firma del Acuerdo de Paz que puso fin a doce años de conflicto armado salvadoreño, la Asamblea Legislativa desarrolló un conversatorio en el que participaron varios de los actores principales de ese acuerdo, comunidad internacional, diputados y estudiantes de bachillerato.
Mario Ponce, presidente de la Asamblea Legislativa destacó que el 16 de enero de 1992 en el castillo de Chapultepec se concretó un acuerdo histórico que dio paso a una nueva etapa de democratización y modernización del país.
“Los Acuerdos de Paz marcaron un hito trascendental en el destino de El Salvador por el impacto que tuvieron en la sociedad e instituciones nacionales, así como para dar origen a profundas transformaciones en lo político, económico, social, derechos humanos y libertades”, dijo Ponce.
El parlamentario consideró que a 28 años de aquel acontecimiento, la tarea que queda a todos los salvadoreños es fortalecer y ampliar los valores esenciales de convivencia pacífica, libertad, solidaridad, seguridad, justicia, orden, tolerancia y respeto mutuo, entre otros.
Luego del discurso de inicio del evento se llevó a cabo el conversatorio denominado “Perspectivas, retos y desafíos, en el marco de la conmemoración del vigésimo octavo aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz de El Salvador de 1992” entre firmantes como Nidia Díaz, Roberto Cañas, Francisco Jovel, Ana Guadalupe Martínez y Oscar Santamaría.
Durante el desarrollo del intercambio de ideas, los firmantes de los acuerdos compartieron con los asistentes todo tipo de experiencias y anécdotas que transcurrieron en más de 28 meses de duración de las mesas de diálogo entre el gobierno del expresidente Alfredo Cristiani y la guerrilla del FMLN liderada por Schafik Hándal.
Los participantes coincidieron en que si bien el conflicto armado al igual que aquellos consensos alcanzados en 1992, en la actualidad parecen no tener valor ante la sociedad, las libertades de las que goza la población son fruto de esa confrontación entre fuerzas opuestas y la posterior salida al conflicto por la vía política, además consideraron que uno de los principales desafíos es la búsqueda de una segunda generación de acuerdos.
“Hay que priorizar e identificar las áreas claves y trabajar en esa dirección tomando el diálogo como método para el acercamiento de posiciones para buscar solución al problema. A nivel legislativo se están haciendo algunas aportaciones, otras por las ONGs y otras instituciones”, afirmó Oscar Santamaría, quien fuera jefe de la delegación gubernamental que participó en el establecimiento de los Acuerdos de Paz.
Nidia Díaz, jefa de fracción del FMLN consideró que en el nuevo entorno que propone la digitalización, todos los adelantos que se logren deben estar en función de la felicidad y paz integral del ser humano y su familia.
“Uno de los retos para el futuro es que cada institución del Estado cumpla con sus competencias y atribuciones; que los funcionarios elegidos por la Asamblea Legislativa sean los idóneos, funcionáramos mucho mejor y se garantizara el estado de derecho”, sostuvo la legisladora Los firmantes de los Acuerdos de Paz lamentaron el desinterés del Ejecutivo por conmemorar este evento histórico, ya que consideraron que esa negociación fue la base de la libertad de pensamiento de que se goza en la actualidad y llamaron a la juventud a estudiar su pasado para no cometer los mismos errores.