Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
“Las mujeres jóvenes y adolescentes -nos han comentado- que están siendo víctimas de extorsión sexual por parte de policías (PNC) y soldados (FAES), que es la misma situación que vivieron antes con las pandillas -que a cambio de sexo- ellas estarían tranquilas en las comunidades”, denunció Roxana Rodríguez, de la Asamblea Feminista.
“Esta situación genera una presión y la mujer es doblemente afectada. Y ahora, ha aumentado la migración de mujeres salvadoreñas a otros países, por este régimen de excepción”, agregó.
En vísperas de la conmemoración del “Día Internacional de la Mujer”, la Asamblea Feminista y la Resistencia Feminista denunciaron la situación que viven las mujeres y mujeres trans en el país. Asimismo, invitaron a la marcha el próximo 8 de marzo con el lema “Juntas Luchamos, Resistimos y Avanzamos”.
En una síntesis social sobre retrocesos o deterioro de derechos humanos de la mujer salvadoreña, Roxana Rodríguez, agregó que la salud es una deuda pendiente que va acrecentándose al negar los presupuestos del gobierno, para ejecutar diversos programas de inversión social y el enfoque de género a las políticas públicas.
“La mujer salvadoreña vive una desatención y desabastecimiento de medicamentos, por parte del Ministerio de Salud, dejando sin atención médica a las mujeres de muchos de los padecimientos, sin tratamientos para enfermedades oncológicas, enfermedades crónicas y sin métodos de planificación familiar”, afirmó.
“En materia de derechos laborales, humanos, educación, tenemos otro gran problema y es el desempleo porque tenemos conocimiento que hay más de 18 mil personas despedidas solo del sector público y de esos despidos son 9 mil 500 mujeres. Y muchas de las mujeres que fueron despedidas pese a su estado de embarazo y sin contar los 80 mil empleos perdidos durante la pandemia en el sector privado”, compartió Rodríguez.
Igualmente, Rodríguez se pronunció por los feminicidios, quien afirmó que existe una “complicación” por parte de la institucionalidad del Estado, al mantener la práctica de la “reserva de información oficial” de datos vitales para realizar investigaciones o mediciones de problemas sociales que afectan a las mujeres y la población.
“Hay actualmente un -silencio- de información oficial sobre los feminicidios y también sabemos que existe una orden -de no tipificar los feminicidios- eso es grave. El año pasado cerró con una cifra oficial de 62 feminicidios que si se compara con años anteriores -se puede decir- que hay una reducción impresionante pero lo que sucede es que no están tipificados como tal”, explicó.
“Nosotras venimos con un monitoreo de medios para recabar información de estos casos y hasta el 14 de febrero teníamos 10 registrados. Sin embargo, ese mismo día una fiscal adjunta visitó la Asamblea Legislativa para discutir la imprescriptibilidad del feminicidio. Y las cifras oficiales que presentó ella, que son datos oficiales que no publican hizo del conocimiento tenían registrados 16 feminicidios: 7 simples y 9 agravados, este es el problema actual de reservar información y no tipificar los feminicidios”, reafirmó Rodríguez.
Mientras, Delia Cornejo, de la Resistencia Feminista, lamentó los despidos masivos de municipalidades e instituciones del Estado, sobre todo, por el alza en el costo de la Canasta Básica que deja en vilo los derechos a la salud y la vida de la población salvadoreña. En especial las mujeres que se constituyen en jefas de hogar de miles de hogares salvadoreños.
“El costo de la vida, lo que realmente refleja es el costo de la Canasta Básica, se trata de la carencia de ingresos de miles de familias que no pueden adquirir medicinas, alimentos y vestuario, porque los niveles del precio están llegando a extremos inalcanzables”, afirmó.
“Según la Oficina Nacional de Estadísticas y Censos (ONEC) del Banco Central de Reserva (BCR) , este 2023 El Salvador tiene la Canasta Básica Alimentaria más cara de la historia. Con costos de los 245 dólares (área urbana) y 185.30 (área rural) eso significa que hay una situación de crisis junto a otros problemas que se suman y están complicado la vida de la población”, agregó Cornejo.
Para Alert Rivera, de CONCAVIS TRANS de la Asamblea Feminista, el Estado de El Salvador mantiene una deuda pendiente con este sector poblacional al “no reconocer los transfeminicidios”, en la ley penal.
“A lo largo de los años se han venido reconociendo estos asesinatos como crímenes u homicidios agravados y sabemos que son asesinatos con lujo de barbarie de como se les asesina a la población LGBT, en especial las mujeres trans”, señaló Rivas.
Rivas lamentó también el abordaje que le están dando a este tipo de delitos el gobierno, cuando saben que terminan con la vida de las mujeres trans.
La Asamblea Feminista y la Resistencia Feminista también invitaron a la población en general, y en especial a las mujeres salvadoreñas, a marchar el próximo miércoles 8 de marzo, para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, saliendo de la Plaza Las Américas, conocida como Salvador del Mundo, y marchar hasta el Parque Cuscatlán, con el fin de denunciar y exigir los derechos de la mujeres.