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Moscú / PL
Rusia aspira a convertirse en la primera potencia exportadora de armamento mundial, aseguró Alexandr Mijéev, director general de Rosoboronexport, la mayor comercializadora de material militar del país.
Mijéev explicó este martes a la prensa que la industria rusa tiene la posibilidad de ocupar las primeras posiciones en esta área y Rosoboronexport se propone aumentar aún más sus capacidades.
En ese sentido, enumeró una serie de nuevos productos que saldrán próximamente al mercado, entre estos las corbetas portamisiles del proyecto 22800 Karakurt, el tanque anfibio ligero Sprut, el sistema antiaéreo Viking, una modificación del sistema Tor y, en el futuro, la exportación del tanque Armata.
Las declaraciones de Mijéev se producen en el contexto del Foro Internacional Técnico Militar Army 2018, que se realiza del 21 al 26 de agosto, en la localidad de Kúbinka, en las afueras de Moscú, para la exhibición de armas rusas y extranjeras de última generación.
Esta edición incluye más de 150 actividades, y asisten a la exposición delegaciones de unos 90 países.
Rosoboronexport continúa este año fomentando y afianzando sus posiciones en el mercado internacional de armamento. Hasta el momento se exportaron productos por un importe superior a los siete mil millones de dólares, según Mijéev, citado por la oficina de prensa de su empresa.
Especialistas aseguran que el mayor exportador global de armamento es Estados Unidos.
En mayo, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, recomendó que deberían elaborarse leyes para condicionar las exportaciones de armas y así garantizar la protección de civiles en conflicto.
El Tratado sobre el Comercio de Armas, que regula el comercio internacional de armas convencionales, desde armas pequeñas hasta carros de combate, aeronaves de combate y buques de guerra, entró en vigor el 24 de diciembre de 2014.
