Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
Yaneth Estrada
@caricheop
Tras un aumento de ataques a policías y soldados de la Fuerza Armada, que ya suma diecisiete muertos, el Presidente de la República Salvador Sánchez Cerén, sostuvo que “el propósito es empañar los avances del actual gobierno en la erradicación de la violencia y utilizar la amenaza para chantajear al gobierno entrante”.
Mencionó que “con esta ola de violencia, los grupos delincuenciales pretenden presionar al nuevo gobierno, para disminuir las estrictas medidas de control penitenciario donde están recluidos los cabecillas de los grupos delincuenciales, para recuperar los contactos directos e indirectos con sus estructuras y reducir la operatividad policial y militar en el territorio, mediante las cuales se han debilitado”.
Sánchez Cerén, explicó que desde que se inició esta situación el 13 de abril pasado, ha dado seguimiento a los hechos a través del gabinete de seguridad girando instrucciones a la Policía Nacional Civil, la Fuerza Armada y los Centros Penales, para que se implementen las acciones que permitan contener esta amenaza delincuencial.
Además, “tal como ya lo ha informado la PNC, se contaban con informes de inteligencia que daban cuenta que el crimen organizado desarrollaría un incremento de las acciones delincuenciales en los dos últimos meses de nuestro gobierno”, dijo el Mandatario a través de un comunicado.
Resultados y acciones
En acciones más concretas, este martes el vocero oficial de la PNC, Inspector jefe Elvis Cisneros, confirmó la detención de Romar Ernesto Reyes Aguilar, cabecilla de una estructura criminal, quien de acuerdo a la investigación ordenaba el homicidio de policías.
En este tema, también el Fiscal General de la República (FGR), Raúl Melara, aseguró que “la oleada de homicidios no nos va a amedrentar. Como FGR estamos redoblando esfuerzos para dar con los responsables. Los vamos a procesar y los vamos a condenar”.
Por su parte, el secretario general de Nuevas Ideas, Federico Anliker, aseveró que “tenemos que ser más estratégicos, trabajar con los sectores y sociedad civil para salir adelante como país y parar la violencia que tanto daño nos hace. Menos mesas de “análisis” y más acción y trabajo rindiendo cuentas de los resultados”, criticó.
Según registros la gestión del ex Presidente Mauricio Funes, dejó al país con cifras de 17, 447 homicidios y una muy discutida “tregua entre pandillas”, ahora investigada por la FGR. Mientras que con la llegada del Presidente Salvador Sánchez Cerén, en 2014 y la implementación del Medidas Extraordinarias y el “Plan El Salvador Seguro” en 2015, los homicidios cayeron un 50 % en los municipios priorizados por mayor criminalidad y se tuvo un 60 % de reducción en la migración, con el Plan Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte (El Salvador, Honduras y Nicaragua), financiado por Estados Unidos para mejor las condiciones de educación, trabajo, delincuencia, lucha contra el narcotráfico, reducir la corrupción en los países de origen.
