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Madrid/dpa
El Atlético igualó al Barcelona en el liderato de la Liga española de fútbol al vencer 2-1 al Athletic de Bilbao, sick mientras el Real Madrid desperdició una gran ocasión de aproximarse a la cabeza al caer por 1-0 ante el Villarreal.
La jornada decimoquinta del torneo trajo un gran triunfador en la figura del Atlético de Madrid, cure que igualó a 55 puntos con el Barcelona después del empate 2-2 de los azulgranas el sábado ante el Deportivo de La Coruña. Por contra, el Real Madrid se quedó a cinco puntos de los líderes.
El conjunto de Diego Simeone se encontró con un partido áspero ante el Athletic de Bilbao. No jugó bien, pero ha alcanzado un grado de fiabilidad tal que no necesita mostrar virtudes ofensivas para decidir partidos igualados.
El descanso llegó con un 1-1 gracias a sendas jugadas aisladas a balón parado. Aymeric Laporte adelantó al Athletic y Saúl igualó justo antes del intermedio. No hubo más en una mala primera parte.
La segunda mitad fue más atractiva y el Athletic pudo resolver con un mano a mano de Aritz Aduriz que sacó el arquero local, Jan Oblak.
La jugada decisiva ocurrió a los 67 minutos, cuando el francés Antoine Griezmann soltó un tremendo disparo desde fuera del área para llevar el delirio al Viente Calderón.
“Seguimos nuestra línea. Siempre trabajamos para lo mejor, pero nuestra línea es superarnos a nosotros mismos en cada partido. No entendemos otro camino que no sea el esfuerzo”, manifestó Simeone al finalizar el partido.
Luego llegó la cita del Real Madrid, saldada con una nueva decepción para sus hinchas. El equipo de Rafael Benítez perdió 1-0 en su visita al Villarreal y desaprovechó una excelente oportunidad de reengancharse a la pelea por la cabeza de la Liga española.
Fue milagroso que el Real Madrid llegara al descanso perdiendo sólo por 1-0. En 45 minutos, el Villarreal metió un gol, tuvo un mano a mano y estrelló un balón en el palo. Poco premio se llevó para su indiscutible superioridad sobre su rival, que se fue al descanso sin un solo disparo entre los tres palos.
El gol llegó a los ocho minutos, cuando Modric perdió un balón, Bakambu asistió a Roberto Soldado y éste marcó sobre la salida de Keylor Navas, que nada pudo hacer. El tanto expuso los problemas del Real Madrid para sacar el balón jugado y el ambicioso y estudiado plan del Villarreal, muy vivo en todas sus líneas.
La segunda parte fue muy diferente. El Real Madrid se lanzó con todo al ataque y tuvo que lamentar su falta de fortuna, porque en la segunda mitad creó suficientes ocasiones para al menos igualar el encuentro. Primero tiró 45 minutos y luego no encontró lo que mereció.
En otro partido, el Valencia consiguió un afortunado empate 1-1 en el campo del Éibar gracias a un autogol de David Junca a seis minutos del final y después de jugar la última media hora con diez futbolistas.
El Éibar se adelantó gracias a un gol de Sergio Enrich a un minuto del descanso y a los 62 minutos pudo ampliar la renta con un penal en el que el Valencia también recibió la expulsión del argentino Lucas Orban. Saúl Berjón lanzó y la intervención del arquero Jaume Domenech salvó al equipo visitante.
El Valencia se marchó de Éibar sin ninguna ocasión clara de peligro, pero a los 84 minutos le sonrió la fortuna con un autogol de David Junca cuando el Éibar tenía controlado el duelo.
El punto le permitió al Valencia mantenerse enganchado a la pelea por los puestos que permiten jugar competiciones europeas, al igual que al Éibar. Ambos equipos tiene 21 puntos.
Además, el Málaga salió de los puestos de descenso con su victoria 2-1 en el campo del Rayo Vallecano, que cae a la zona fatídica de la clasificación.
