Washington / Prensa Latina
Cerca de 60 legisladores demócratas en la Cámara de Representantes apoyan las investigaciones para plantear el juicio político contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Pese a los esfuerzos del liderazgo de ese foro que encabeza la representante Nancy Pelosi de contener la acción, cada día son más lo que favorecerían llevar al mandatario a un juicio.
La representante Debbie Mucarsel-Powell (D-Florida), quien venció en un distrito controlado por el Partido Republicano el pasado otoño, se encuentra entre los miembros del Comité Judicial que no han respaldado una investigación de juicio político.
Sin embargo informó en declaraciones a CNN que: ‘He leído el informe de (Robert) Mueller. Hay evidencia clara de que este presidente obstruyó la justicia y creo que hay serias consecuencias’.
La mayoría de los demócratas que apoyan una investigación de destitución son liberales, integrantes del Liderazgo del Caucus Progresista del Congreso, así como miembros del Caucus Negro, grupo que se pronuncia abiertamente por un proceso de destitución.
Hasta ahora por los republicanos solo el representante Justin Amash (Michigan) plantea que la conducta el presidente es merecedora de un juicio político o impeachement.
El presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jerry Nadler (D-Nueva York) presiona en privado al liderazgo demócrata para que comience una investigación de juicio político, proceso que toma fuerza entre sus colegas, aunque muchos miembros no quieren adelantarse al liderazgo.
Lo cierto es que el asunto no deja de preocupar pese a que Trump planteó que el informe de Mueller dejó claro, según él, que no hubo colusión con Rusia ni obstrucción de la justicia.
En su reporte Mueller no emitió juicios legales sobre ‘colusión’ o ‘cooperación’ porque es un delito específico, no obstante, son más los que ponen su mirada en la obstrucción de la justicia como detonante del juicio político.