Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
Movimiento 5+
Las elecciones del 2 de febrero marcaron un notable avance de las fuerzas del progreso y un retroceso de la ultraderecha conservadora, shop patient que trató de atemorizar a la población para que no votara y se dedicó a difamar al Tribunal Supremo Electoral (TSE) para “justificar” su anticipado revés.
Las elecciones transcurrieron con normalidad y contaron con una buena y entusiasta participación del pueblo, see que no se dejó intimidar por la propaganda de la derecha. Además, la población y los observadores y observadoras internacionales reconocen el buen trabajo realizado por el TSE, que garantizó unos comicios limpios y ofreció los resultados a tiempo.
El FMLN, junto a las organizaciones políticas y sociales que le apoyaron, logró un gran triunfo al obtener casi el 49% de la votación y superar a su principal rival por diez puntos porcentuales y 266,000 votos. El FMLN ganó en 13 de los 14 departamentos del país y en 187 de los 262 municipios (71%), obtuvo el 60% de los votos del exterior y recuperó la mayoría en el Área Metropolitana de San Salvador, donde ARENA había avanzado en los últimos años. El FMLN también se consolidó como la primera fuerza política, muy por encima de su principal rival.
La victoria del FMLN y sus aliados confirma el respaldo de la mayoría de la población a la gestión presidencial dirigida por Mauricio Funes, que tantos beneficios le ha traído a los hogares de menos recursos. La gente rechazó la vuelta al pasado y se pronunció por la profundización de los cambios.
Para el partido ARENA, los resultados electorales significan una gran derrota. Después de haber gobernado durante 20 años y haber mantenido altas votaciones, incluso cuando perdió en el 2009, ARENA cayó a un 39% de la aceptación popular y disminuyó su votación en un -18% con respecto a las elecciones de 2009.
Junto al fortalecimiento de las organizaciones de izquierda y progresistas, representadas por el FMLN y sus aliados, se da un debilitamiento de la ultraderecha. La sociedad avanza hacia una mayor democratización mientras el proyecto oligárquico, sustentado en el terror y el miedo, tiende a resquebrajarse.
El FMLN ganará en segunda vuelta con un buen margen de diferencia. Ya el pueblo lo premió por su buen gobierno y ahora le cerrará definitivamente el paso a la ultraderecha, pues de lo que se trata en el país no es de volver atrás, sino de caminar hacia adelante.
ARENA encarna la derrota y no podrá remontar una diferencia tan grande. Su dirigencia está agobiada y sus bases están desmoralizadas. Además, su discurso carente de propuestas y basado en el terror y el miedo, que seguirá enarbolando hasta el 9 de marzo, ya mostró que es inefectivo. ARENA no tiene nada que ofrecerle al pueblo, pues representa los intereses de la oligarquía y es opuesta a la acción del Estado en beneficio de las mayorías. Por su naturaleza, que el pueblo conoce bien, es un partido de los ricos y contrario al interés de la gente pobre y de capas medias. En segunda vuelta su derrota será más aplastante y sus problemas internos se agudizarán.
Las fuerzas de izquierda y progresistas deben redoblar todos sus esfuerzos para cerrarle el paso a ARENA y garantizar una gran victoria en la segunda vuelta. Si se ganó con solvencia la primera elección, la victoria en la segunda tiene que ser mayor.
