GINEBRA/CIUDAD DE PANAMÁ
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, expresó este martes su seria preocupación porque el estado de derecho y el orden constitucional están siendo socavados en El Salvador a medida que las autoridades implementan medidas para combatir la propagación de la COVID-19.
El órgano legislativo del país declaró una emergencia nacional en marzo, introduciendo algunas restricciones en cuanto al tránsito y reuniones públicas. También estableció ciertas medidas, sin especificar las penalidades para quienes no cumplieran con éstas. El Presidente ordenó la cuarentena domiciliar el 21 de marzo.
Desde entonces, las fuerzas de seguridad salvadoreñas han estado arrestado a personas por presuntamente no observar la cuarentena domiciliar. Según los informes, las personas detenidas han sido trasladadas a sedes policiales, centros de cuarentena e instalaciones improvisadas, y detenidas en condiciones a menudo de sobrepoblación y poco higiénicas hasta por 30 días.
La Institución Nacional de Derechos Humanos ha reportado 149 casos de presuntas detenciones arbitrarias, incluyendo casos de violaciones al uso de la fuerza y malos tratos, del 21 de marzo al 13 de abril.