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Barcelona/dpa
Impulsado por su tridente ofensivo, el Barcelona se clasificó hoy para los cuartos de final de la Liga de Campeones europea al superar por 3-1 al Arsenal en uno de sus peores partidos de la temporada.
Los goles del brasileño Neymar (17′), del uruguayo Luis Suárez (64′) y del argentino Lionel Messi (88′), sin embargo, resolvieron el choque para los azulgrana y confirmaron el poderío de los tres astros del conjunto dirigido por el español Luis Enrique, que también contó con una gran actuación de su arquero, el alemán Marc-André Ter Stegen.
El Barcelona, que ya se había impuesto por 2-0 en la ida en Londres con un doblete de Messi, certificó su pase sumando en el Camp Nou su trigésimo octavo partido invicto en todas las competiciones.
El Arsenal, que igualó el duelo en el inicio de la segunda parte con un precioso tanto del egipcio Mohamed Elneny (50′) y jugó mucho mejor que en la ida, se quedó a medio camino de la gesta y, un año más, se despidió de la máxima competición continental a manos del vigente campeón.
El choque, uno de los más discretos de los azulgrana en lo que va de temporada, fue durante muchos minutos como un entrenamiento para el Barcelona, que se apresuró a ampliar su ventaja de la ida con un bonito tanto en al cuarto de hora de partido y, luego, se relajó en exceso.
Muy conectados en el inicio del choque, los azulgrana pagaron su posterior flojera con el empate de los ingleses, que pudieron adelantarse por medio de Danny Welbeck en el 57′. Rápido e imperial, el argentino Javier Mascherano evitó el segundo tanto de los de Arsene Wenger interponiéndose en la trayectoria del balón desde el piso.
Fueron los peores minutos del Barcelona, también los de más sufrimiento, después de que los de Luis Enrique manejaran el primer acto sin mayores complicaciones.
El sufrimiento azulgrana, sin embargo, concluyó enseguida con un espectacular gol de Suárez, que batió al colombiano David Ospina con una volea preciosa tras recibir un excelente servicio del brasileño Dani Alves.
El tanto del uruguayo no acabó de desactivar al Arsenal que, tras tener el triunfo a su alcance y ver cómo los de Luis Enrique resolvían el duelo en una acción letal, siguieron poniendo a prueba, sin más suerte, al seguro Ter Stegen.
El Barcelona había abierto el marcador en la primera parte con un gol de Neymar que ilustró el grado de concentración de los de Luis Enrique en el inicio, pues nació de un robo de balón de Sergio Busquets en la zona de construcción de los ingleses, que asistieron al desenlace impotentes.
Busquets sirvió para Suárez y éste, viendo la llegada de Neymar desde la segunda línea, lo habilitó para que el brasileño batiera a Ospina, ante la mirada de tres defensores ingleses.
A partir de entonces, el choque fue un correcalles entre las dos áreas, con más y mejores ocasiones para los de Wenger, que no acertaron a definir, a veces por demérito propio, otras por mérito de la zaga azulgrana, pese a no contar con el sancionado Gerard Piqué.
Su sustituto, el francés Jérémy Mathieu, resolvió bien en un disparo de Elneny muy cerca del arco de Ter Stegen. El alemán Mesut Özil y Alexis Sánchez desperdiciaron otro par de buenas ocasiones sin oposición. En su regreso al Camp Nou, el chileno pasó prácticamente desapercibido.
El Barcelona jugó con fuego durante bastante minutos, pero, tras el aviso del Arsenal, cerró el duelo con el tanto de Suárez y el casi inevitable gol de Messi cuando el partido ya moría.
Sólo faltaba el crack argentino para completar la faena del tridente y Messi la remató con otro gol hermoso, un suave toque que elevó el balón por encima de Ospina.
Invicto en 38 partidos, el Barcelona certificó su superioridad impidiendo la gesta del Arsenal y certificando el pase para los cuartos de final de la «Champions».
