Benemérito Padre de la Patria Centroamericana.
El Primer Grito de Independencia de Centroamérica se dio en San Salvador. En la conspiración de este movimiento libertario, mind la figura central fue el Presbítero y Dr. José Matías Delgado.
El Presbítero y Doctor José Matías Delgado, nació en la ciudad de San Salvador el 24 de Febrero de 1767.
Fueron sus padres, don Pedro Delgado y doña Ana María de León. Se ordenó de Sacerdote en Guatemala, donde a la vez hizo sus estudios previos al doctorado en Teología, Derecho Civil y Canónigo.
Fue el Padre Delgado, el eje alrededor del cual giraron las ideas y movimientos revolucionarios que tuvieron por resultado la independencia centroamericana, y además de clérigo ejemplar, se distinguió por sus cualidades de gran patriota.
Debido a su amor por la libertad y por sus constantes sueños a favor de la emancipación política de Centro América, sufrió persecuciones y vejaciones, ya que era considerado como el más tenaz conspirador de aquella época.
Murió en San Salvador, el 12 de Noviembre de 1832. Sus restos se encuentran sepultados en la Iglesia de El Rosario.
Nació en la ciudad de Ahuachapán, el año de 1782. A los 18 años obtuvo el grado de bachiller en Medicina de la Universidad de San Carlos, en Guatemala, y 2 años después su doctorado.
A su regreso a El Salvador contrajo matrimonio con doña Ana Andrea Cañas, prima hermana del Prócer José Simeón Cañas. Fueron sus hijos Santiago José y Leoncio Francisco.
Participó en el movimiento revolucionario que culminó con el Primer Grito de Independencia de Centro América, el 5 de Noviembre de 1811; pero su mayor participación la tuvo en el movimiento del 24 de enero de 1814, a raíz del cual fue hecho prisionero y encerrado en el Cuartel del Fijo de San Salvador.
Murió trágicamente en esas cárceles cuando sólo contaba 32 años de edad, el 17 de abril de 1814.
Fue don Domingo Antonio de Lara, uno de los patriotas que juntamente con Arce, Rodríguez y Castillo, se enfrentó con valor a la guardia española.
Nació el 30 de agosto de 1783, en San Salvador. Comenzó sus estudios de Filosofía en la Universidad de Guatemala, mostrando siempre mucho entusiasmo para todos los estudios que comprendieran psicología humana.
Poco tiempo después se trasladó a San Salvador, donde necesitaban su ayuda para el sostenimiento de la familia, y así fue como trocó su vida de estudiante en una vida de campo, en los obrajes del añil, no descuidando por esto el cultivo de la inteligencia.
En 1811 se casó con doña Manuel Antonia de Arce, hermana del ilustre Manuel José Arce.
Para el movimiento de 1811, fue puesto en prisión juntamente con otros patriotas, continuando al salir de la cárcel la propagación de las ideas de libertad.
Así fue como en 1814, en el nuevo intento de emancipación, cayó herido en una carga de los realistas españoles.
Fue puesto preso mientras se curaba de sus heridas, en su hacienda, habiendo durado cinco años en la cárcel, pero al salir de ella, nuevamente emprendió los trabajos revolucionarios, encontrándose entre los que, el 15 de septiembre de 1821, trabajaron por la Independencia.
Después de encabezar la lucha contra el imperialismo mexicano, y no habiendo querido aceptar la candidatura para Jefe de Estado, se retiró apaciblemente a su hacienda, para pasar sus últimos días en la tranquilidad.
El 1 de enero de 1787, veinte años después que el Padre Delgado, nació en San Salvador, Manuel José Arce, figura de la política centroamericana, que tomó parte, juntamente con muchos políticos, en los movimientos de 1811.
Fue Arce el Primer Presidente de Centro América, viéndose obligado a renunciar al ser abandonado por el partido liberal. Dejada la Presidencia se retiró a México.
Poco después volvió a su patria, pero pronto fue obligado a refugiarse en Honduras.
Pobre y abatido por sus últimos fracasos murió el 14 de diciembre de 1847, siendo sus restos sepultados en la Iglesia de La Merced, de San Salvador.
Nació en el Barrio de Candelaria el 29 de julio de 1780, de una familia humilde de origen y pocos bienes de fortuna.
Estuvo junto con Delgado, Arce y Rodríguez para la insurrección de 1811, y fracasado el primer movimiento revolucionario, continuó trabajando por el ideal de la libertad, siendo electo en 1814, Alcalde de San Salvador, después de Juan Manuel Rodríguez.
La Comuna en manos de esos patriotas, hizo fácil la nueva intentona de la Independencia de 1814.
Pedro Pablo Castillo, al mando de un pequeño grupo de patriotas, ocupó militarmente la parroquia de San Francisco y de acuerdo con Juan Manuel Rodríguez, quien a la cabeza de otro puñado de valientes, se habían posesionado de otros lugares, hizo frente a las tropas realistas que intentaban sofocar el movimiento.
Aquí fue donde, provocado por Zaldaña, se batió, dejando muerto en el campo al Jefe realista.
Por esta razón, fracasado nuevamente el movimiento revolucionario, su cabeza fue puesta a precio por las autoridades españolas, viéndose obligado a emigrar a Jamaica, donde murió antes de 1821, sin ver el fruto de sus patrióticos anhelos: La Independencia Centroamericana.
Nació don Nicolás en Tona-catepeque, el 16 de diciembre de 1742; que al igual que don Vicente y Don Manuel, hijos de don Manuel Aguilar, participaron en las gestas independentistas.
Los tres hermanos se sintieron atraídos por la carrera eclesiástica y así fue como pronto fueron coronados sus estudios, que hicieron brillantemente, mereciendo siempre los elogios de sus profesores.
Don Nicolás obtuvo el curato de San Salvador, puesto que logró por concurso.
En el movimiento de 1811, se encontraron los hermanos Aguilar, trabajando en el mismo empeño y patriotismo que siempre les había distinguido y para 1814, se encontraban don Manuel, encarcelado, don Vicente reconcentrado en Guatemala y don Nicolás, si bien libre por consideración de sus años, muy vigilado, pues aunque viejo, era un formidable enemigo, siempre dispuesto a defender las ideas de libertad.
Vicente Aguilar, al igual que Nicolás y Manuel, fue un Prócer de la Independencia de El Salvador.
Vicente, cuyo padre fue Don Manuel Aguilar, nació en San Salvador el 5 de abril de 1746.
Los tres hermanos se sintieron atraídos por la carrera eclesiástica y así fue como pronto fueron coronados sus estudios, que hicieron brillantemente, mereciendo siempre los elogios de sus profesores.
Durante muchos años, don Vicente administró los curatos de Cojutepeque, Zacatecoluca, Perulapán y otros, sabiéndose captar siempre el cariño de los feligreses, a quienes protegía en sus necesidades.
En el movimiento de 1811, se encontraron los hermanos Aguilar, trabajando en el mismo empeño y patriotismo que siempre les había distinguido y para 1814, se encontraban don Manuel, encarcelado, don Vicente reconcentrado en Guatemala y don Nicolás, si bien libre por consideración de sus años, muy vigilado, pues aunque viejo, era un formidable enemigo, siempre dispuesto a defender las ideas de libertad.
Don Manuel Aguilar y sus hermanos Nicolás y Vicente, hijos de Don Manuel de Aguilar, son recordados en este mes de septiembre, por figurar en la historia como Próceres de la Independencia patria.
En las dos ediciones anteriores hemos hablado de Don Nicolás y Don Vicente. Esta vez le toca el turno a don Manuel, quien nació en San Salvador, el 26 de junio de 1750.
Los tres hermanos, como ya lo hemos dicho, se sintieron atraídos por la carrera eclesiástica y así fue como pronto fueron coronados sus estudios religiosos.
Don Manuel, según la historia, ayudó a Don Nicolás en el desempeño de su misión como coadjutor.
Don Manuel estuvo también de cura en Zacatecoluca.
Los tres hermanos Aguilar participaron en el movimiento insurreccional de 1811. Para 1814, don Manuel se encontraba encarcelado, don Vicente reconcentrado en Guatemala y don Nicolás, muy vigilado por las fuerzas españolas.
La Independencia debe mucho a estos tres adalides que, unidos por el estrecho vínculo de la sangre, lo estuvieron también por sus ideas de engrandecimiento de la Patria.
También en San Salvador, nació este Prócer el día 31 de diciembre de 1771.
Juntamente con Arce y Delgado trabajó intensamente por la Independencia de Centro América.
Sirvió diversos cargos y en 1824, fue electo Jefe del Estado de El Salvador, decretando durante su Gobierno, y con fecha 4 de julio, la primera Constitución de ese Estado; instaló la Corte de Justicia y bajo sus auspicios fue realmente abolida la esclavitud.
Juntamente con Arce y otros hombres de Estado llevó la primera representación diplomática a Washington en el año de 1823.
Fue Juan Manuel Rodríguez, un Prócer que se preocupó siempre por mejorar las condiciones sociales de los pueblos.
José Simeón Cañas
Presbítero y Doctor, nacido en la ciudad de Zacatecoluca, República de El Salvador, el 18 de febrero de 1767, era de una familia acaudalada que con el fin de educar a sus hijos se trasladó a Guatemala. Desempeñó el alto puesto de Rector de la Real y Pontificia Universidad de San Carlos, en Guatemala, donde se conquistó el aprecio de todos por su sabiduría y el buen tacto con que resolvía las dificultades que se le presentaban.
Fue quien, con fecha 31 de diciembre de 1823, pidió a la Asamblea que fuera decretada la abolición de la esclavitud, abogando por la igualdad de los hombres.
El doctor Cañas tenía un gran corazón: no compartía su pan con los pobres, se los daba todo, y así fue como repartió entre todos los menesterosos la cuantiosa herencia de sus padres.
Su salud fue siempre muy mala, pero él con gran esfuerzo supo sobreponerse a sus achaques, y mantener siempre su espíritu sano y fuerte contra todos los males.
Falleció el Padre Cañas el 4 de marzo de 1838, y sus restos fueron sepultados en la Iglesia de El Pilar, de San Vicente.