Santiago Leiva
@DiarioCoLatino
Como león rugiente, diagnosis México espera agazapado al pie de la grama; observa de reojo a un El Salvador que se presenta manso y confundido como corderito destino al matadero. Ese es el mismo guión de siempre, sale se repite una y otra vez cuando Azul visita el estadio Azteca, y hoy más que nunca parece escrito en piedra.
Nunca, El Salvador había visitado el Coloso de Santa Úrsula con tan poco crédito como esta vez, y no por talento sino porque lo hace con un improvisado equipo de jóvenes que apenas salieron del “cascarón”.
Es a partir de ahí que hasta las expectativas de los más entusiastas se reducen a no terminar goleados, y aunque hay hinchas que creen en milagros, muchos de los salvadoreños no dudarían en apostar por un 5-0.
Las derrotas de El Salvador ante México no son nuevas. Las resalta con números grandes las estadísticas de la FIFA al señalar que de 30 enfrentamientos, 25 han sido victorias para los charros, un empate y cuatro triunfos cuscatlecos.
Tras analizar los números, lo que viene luego es una inyección de pesimismo y más si se juega en el estadio Azteca, un majestuoso escenario que aturde con su ruido y que ve doblar rodillas a visitantes extraños. Nunca la Azul ha puntuado ahí y está noche suena a misión imposible.
Empero, a tanto llega la fe de algunos que no dudan en traer al presente la historia bíblica de “David y Goliat”, y no es malo porque en el fútbol se vale soñar. ¿Qué salvadoreño no alucinaría con una épica victoria de la Azul sobre “el Tri” en tierras aztecas?.
Es que sobran los dedos de una mano para contar las victorias sobre México y eso hace que cada triunfo quede registrado como fecha histórica importante en las hazañas de El Salvador. Se le ganó en Honduras para las eliminatorias hacia España 82, se celebra aún el 2-1 con que se impuso la Azul durante las eliminatorias rumbo a Estados Unidos 94.
Una y otra vez se repite el vídeo de Carlos Castro Borja o William Renderos Iraheta celebrando los goles de este anecdótico triunfo sobre Hugo Sánchez y México. Tampoco nadie olvida que con goles de Eliseo Quintanilla y Julio Martínez se derrotó a México y Cuahtemoc Blanco en el césped del Cuscatlán en 2009.
Pero esas celebraciones reales ya quedaron lejos, lo que esta noche espera a la improvisada selección cuscatleca, puede ser el punto y seguido de una pesadilla que arrancó con los amaños, que continúo con la batalla pública entre los federativos y viejos seleccionados.
El desenlace final de esta triste e improvisada historia se conocerá esta noche cuando al filo de las 8:00 los hombres de Ramón “el Primitivo” Maradiaga se enfrente a Javier “el Chicharito” Hernández y compañía.