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Buenos Aires/dpa
Boca Juniors y River Plate empataron sin goles en un tenso superclásico del fútbol argentino que tuvo lugar en la ida de las semifinales de la Copa Sudamericana, ask disputado en La Bombonera de Buenos Aires.
La revancha será el próximo jueves en el estadio Monumental. El ganador se medirá en la final ante el vencedor de la otra llave, online en la que Atlético Nacional de Colombia venció 1-0 como local a Sao Paulo de Brasil.
“El partido no fue bueno, stuff ninguno de los dos jugó bien, fue muy trabado. Era para un empate, era lo más justo, queríamos ir pero no se pudo. Hubo mucho lucha”, dijo el defensor de Boca Juan Forlín.
Marcelo Barovero, arquero de River, coincidió en el análisis: “Es una instancia decisiva, nos jugamos mucho los dos. No estuvo bien jugado. Pero es un buen arranque de la serie, confiamos en hacer un muy buen papel de local. Confiamos muchísimo en definirlo”.
El duelo entre los equipos más populares de la Argentina estuvo cargado de una gran expectativa desde la semana previa. Al final, el partido dejó mucho que desear. Se jugó con bastantes nervios, pierna fuerte, infracciones y casi no hubo situaciones de gol: Boca tuvo un cabezazo al final, River ningún tiro al arco.
Boca se mostró más incisivo en el comienzo, presionando en la mitad de la cancha y recuperando rápido la pelota, ante un River que se paró para contraatacar y a la espera de algún error defensivo del “xeneize”.
De a poco, el partido fue cada vez más trabado en el mediocampo y se jugó bien lejos de los arcos.
Recién a los 22’ Boca tuvo una aproximación con un remate de media distancia de Fernando Gago que fue contenido sin problemas por el arquero Marcelo Barovero. Fue el único tiro arco del local.
Juan Manuel Martínez era uno de los más activos del “xeneize” pero fue reemplazado por el chileno José Fuenzalida a la media hora. El delantero sufrió una fuerte infracción de Leonel Vangioni a los 5’, hizo lo posible por seguir pero no aguantó y tuvo que abandonar el campo de juego.
River no contó con el uruguayo Rodrigo Mora, ya que el atacante fue dado de baja por una infección abdominal. El juvenil Giovanni Simeone ocupó su lugar desde el arranque y, en el primer tiempo, fue protagonista de la única aproximación del “millonario” pero no pudo dominar dentro del área una habilitación de Leonardo Pisculichi.
En el segundo tiempo se vio un River que recurrió con frecuencia a las infracciones para detener los ataques de Boca, que a su vez no le encontró la vuelta para lastimar a su rival.
A los 51’ Boca llegó algo más claro, con una pelota que robó Gago en la mitad de cancha y cedió para Andrés Chávez, que sacó un fuerte remate que exigió una buena respuesta de Barovero, que contuvo sin dar rebote.
Recién a los 92’ Boca tuvo la llegada más clara de todo el partido cuando, tras un tiro libre libre, Gago cabeceó dentro del área y encontró bien parado a Barovero.
River llegó al duelo con Boca en un momento de cierto declive, al cosechar dos de los últimos nueve puntos en juego en el torneo local y perder un invicto de 31 partidos.
El empate mantiene ahora al “millonario” con expectativas de alcanzar la doble corona. Pero antes de la revancha ante Boca, River visitará el domingo a Racing, su escolta con un punto menos en el torneo local, cuando restan tres fechas.
Mientras, alejando de la lucha por el título, Boca recibirá a Independiente seguramente con una alineación alternativa para tener a los titulares descansados en la definición de las semifinales de la Sudamericana ante River.
Boca comenzó la serie con una ventaja en el historial ante River, que busca poner fin a una maldición internacional ante su máximo rival.
