Taormina/dpa
El borrador de conclusiones de la cumbre del G7 en Italia incluye el derecho «soberano» de los países a cerrar sus fronteras e imponer límites migratorios, imponiéndose así los puntos de vista de Estados Unidos y Reino Unido, según el texto al que tuvo hoy acceso dpa.
«Reiteramos el derecho soberano de los países a controlar sus fronteras y establecer límites claros a los niveles netos de migración, como elemento esencial de su seguridad nacional y su bienestar económico», dice el borrador.
Dicho lenguaje refleja las posiciones sobre migración de los nuevos Gobiernos de Washington y Londres. La declaración final de la cumbre anterior, celebrada en Japón, no recogía ese mensaje.
El anfitrión de la cumbre, Italia, vive desde hace tiempo una ola migratoria que llega a sus costas a través del Mediterráneo, procedente principalmente desde Libia. Por ello quería que la migración ocupase un lugar relevante en la agenda de la cumbre de Taormina, aunque pedía políticas más liberales en esta cuestión.
El borrador de la cumbre subraya «la necesidad de apoyar a los refugiados tan cerca como se pueda de sus países, así como de posibilitarles el retorno» y de «ayudar a los países (de origen) a establecer las condiciones para resolver las causas de la migración».
Los países deben garantizar «una migración segura, ordenada y legal», además de «proteger a los migrantes y refugiados más vulnerables, como las mujeres en peligro, adolescentes, niños y menores no acompañados» y establecer controles fronterizos y esquemas de retorno y readmisiones, añade el texto.
«Se trata de instrumentos esenciales para reducir la migración irregular, luchar contra el tráfico, los trabajos forzados, la esclavitud moderna y abordar aspectos como el crimen organizado, el extremismo violento, el terrorismo y el comercio ilegal», apunta.
«De esta forma, podremos salvaguardar los aspectos positivos de la migración, a la vez de reconocer el derecho inherente de los países de acogida a establecer políticas en su interés nacional», añade el borrador.
Algunas ONG criticaron al presidente estadounidense, Donald Trump, por endurecer el tono del G7 respecto a la migración. «Si se confirma este texto corto de miras y regresivo, el G7 podría perder credibilidad. La falta de visión de un líder no debe reducir las capacidades del resto del G7 para afrontar sus responsabilidades en el mundo», afirmó Friederike Roeder, de la ONG One.