TeleSUR
El ministro de Finanzas de Brasil, Fernando Haddad, propuso la creación de un impuesto mínimo global sobre la riqueza para que los multimillonarios ayuden a la reducción de las desigualdades, durante la inauguración de la reunión de los ministros de Finanzas de los países integrantes del G20, que representan más del 80 por ciento del PIB mundial, efectuada en Sao Paulo.
Haddad propuso “redefinir la globalización”, adoptar medidas para el desarrollo sostenible, la reducción de la desigualdad y la resolución de conflictos.
“Necesitamos admitir que aún necesitamos hacer que los multimillonarios del mundo paguen su justa contribución en impuestos”, aseguró.
En ese sentido, defendió la creación de un impuesto mínimo a las grandes fortunas que, según él, “podría constituir el tercer pilar de la cooperación fiscal internacional”.
“Hemos llegado a una situación insostenible en la que el 1 por ciento más rico posee el 43 por ciento de los activos financieros del mundo y emite la misma cantidad de carbono que los dos tercios más pobres de la humanidad”, subrayó.
Sin embargo, de acuerdo al jefe de cartera, “los países más pobres deben soportar costos ambientales y económicos crecientes, mientras ven sus exportaciones amenazadas por una creciente ola proteccionista, así como una parte significativa de sus ingresos comprometidos por el servicio de la deuda, en un escenario de alto interés post-pandemia (Covid-19)”.
En dicha línea, afirmó que “en un mundo en el que el trabajo y el capital son cada vez más móviles, la pobreza y la desigualdad tienen que ser enfrentados como desafíos globales, bajo la amenaza de la ampliación de las crisis humanitarias e inmigratorias”.
Como presidente del grupo este año, Brasil planteó la lucha contra el hambre, la pobreza y las desigualdades como prioridades de discusión. Asimismo, la embajadora brasileña y coordinadora del Canal de Finanzas del G20, Tatiana Rosito, señaló que el objetivo de este encuentro del G20 es colocar la desigualdad en el centro de la política económica.