Rebeca Henríquez
@RebeHenriquez
El cuadro de Adenor Bacchi o mejor conocido como el “Tite” siguió un monólogo de ataque, retroceso y reestructuración en el área del rival, en el primer tiempo, sin dar oportunidad a Serbia de proponer una estrategia diferente o producir mayores oportunidades en la portería de Alisson Becker, pero a pesar de las llegadas peligrosas que los brasileños generaron y su plantación en el área, la línea defensiva de serbia, también tomó un papel protagónico y dio lugar a Vinicius, Neymar y Rafinha para que mantuvieron más presencia en la zona de Milinkovic.
Brasil presionó, insistió y siguió en la zona de peligro del arquero serbio, hasta que llegó el primero a los 62´, tras una jugada que mostró el aguante que tiene el equipo 5 veces campeón del mundo. La jugada la protagonizó Neymar por el sector derecho, quien asistió a Vinicius para mandar el balón a la red que quedó en las manos de Milinkovic, tras el remate Richarlison apareció para rematar el balón en la red de los europeos.
Al 73´ lo volvió a hacer, el delantero del Tottenham se mandó con un golazo que partió en colectivo con Neymar para Vinicius, el 20 del “Tite” mandó un centro a Richarlison y este acomoda de pecho para mandar de tijerazo el 2-0 a la portería de Serbia, una verdadera obra de arte con el que los brasileños confirmaron que el «carnaval» comienza con la verdeamarela en la cancha.