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JOSÉ GUILLERMO MÁRTIR HIDALGO
Rudolf Höss fue comandante de Auschwitz desde mil novecientos cuarenta hasta finales de mil novecientos cuarenta y tres1. Auschwitz fue un campo de exterminio nazi, donde se llevó un proceso industrial de muerte atroz de dos millones y medio de personas. En su libro “Yo, Comandante de Auschwitz”, Höss confirma los horrores de la matanza. Narra que el Reichsführer, Heinrich Himmler, lo mandó a preparar la aniquilación de los judíos, consideró aquella orden algo monstruosa, pero, los argumentos le hicieron pensar que las instrucciones quedaban perfectamente justificadas.
El adoctrinamiento al que había sido sometido le impedía elaborar un juicio personal, por lo que tenía que ejecutar la orden recibida. Comenta que para que no lo acusaran de débil, tenía que mostrarse duro e implacable. Rudolf Höss se juzgó como “una inconsciente ruedecilla en la maquinaria del Tercer Reich”. Fue condenado y colgado, el siete de abril de mil novecientos cuarenta y siete.
Höss se percibía como un simple burócrata. Dos aspectos negativos de la burocracia son, las rutinas cotidianas y la presión que la estructura ejerce sobre el funcionario para que sea metódico, prudente y disciplinado2. Una disciplina eficaz supone normas reforzadas con sentimientos que imponen al individuo devoción a sus deberes, agudo sentido de limitación de su autoridad y competencia y la ejecución metódica de actividades rutinarias. La vida oficial del burócrata está destinada por la acción disciplinada en conformidad con el reglamento oficial. Esta insistencia sobre la adhesión a procedimientos formalizados, produce una rigidez que impide adaptarse rápidamente.
La burocracia es una organización o estructura caracterizada por procedimientos centralizados o descentralizados, división de responsabilidades, especialización del trabajo, jerarquía y relaciones impersonales3. El término viene del francés bureaucratie, donde bureau significa oficina o escritorio y cratie, significa poder o fuerza. Burocracia expresa a individuos que ostentan el poder desde el escritorio. La burocracia tiene una connotación negativa y se asocia a ineficiencia, pereza, derroche de medios, papeleo y tramitología.
Las organizaciones burocráticas, tienen que pagar su eficacia técnica con la autoridad de los funcionarios y la rutina. La burocracia puede degenerar en una jerarquía vertical de la autoridad que causa confusión o conflictos de competencia, idoneidades poco claras, nepotismo, corrupción, enfrentamientos políticos y otras degeneraciones. Los funcionarios pueden eludir responsabilidades y distribuir funciones inefectivas. Ejemplos extremos sobre la burocracia es el trato a los seres humanos como objetos impersonales.
El mérito principal de la burocracia es su eficacia técnica4. Pero rehúye casi por completo a la discusión pública de sus técnicas, aunque, pueden discutirse públicamente sus orientaciones políticas. La burocracia es eficaz, porque hay seguridad en las reacciones debido a una estricta observancia a las reglas. La observancia a las reglas lleva a hacerlas absolutas. Esto impide una rápida adaptación en circunstancias especiales. Es decir, los elementos que conducen a la eficacia, producen ineficacia en casos especiales.
Los funcionarios burocráticos se identifican con su modo de vida. Tienen el orgullo de gremio que los induce a hacer resistencia al cambio en las rutinas y a permutas impuestas por otros. La personalidad del burócrata se forma en torno a la impersonalidad. Ya que la conducta estereotipada, no se adapta a las exigencias de los problemas individuales. Esto lleva a una actitud aparentemente dominadora, que genera un conflicto en las relaciones del burócrata con el público o clientela, cuando la relación personal se releva a una relación impersonal.
DESPOTISMO BURÓCRATA
El abogado y administrador colombiano Mario Fernando Prado señala que cuando los candidatos políticos todavía no han sido votados, son todo oídos a los problemas y solicitudes5. Pero cuando el político ya es gobernante, delega las explicaciones a funcionarios con horarios de oficinas, es decir, a subalternos anónimos de espaldas a la opinión pública. Estos determinan lo que es mejor, sin explicar sus determinaciones y convencer de la conveniencia de sus acciones.
Este despotismo burócrata mira a los gobernados por encima del hombro y son despreciativos con la gente. Estos déspotas burócratas son unos omnipresentes que se las saben todas. Son el peor enemigo de un gobierno. Sirven como aislantes entre los gobernantes y los gobernados. No obstante, son empleados públicos que reciben su salario de los impuestos de los contribuyentes. En el despotismo burocrático predominan los intereses corporativos sobre los ciudadanos. Esto conduce a un déficit en la democracia y a un desafecto por la política.
Populismo, totalitarismo y despotismo burocrático dominan El Salvador de Nayib Bukele6. Quien tiene un Congreso mayoritario, así como jueces y fiscales a su favor. Subestima y desvaloriza la independencia del poder judicial. Y va contra el principio que la política es fundamental para alcanzar consensos básicos. Por el contrario, estima polarizar e incendiar los caldeados ánimos de la sociedad. Ya tiene el control de los aparatos del poder y busca el poder absoluto sobre la conciencia de los ciudadanos.
AUTORITARISMO
La personalidad autoritaria es definitiva en el despotismo burocrático. Por autoritarismo se entiende, según la psicología social, la actitud o comportamiento que tiene la convicción que es necesaria una estricta aceptación de la autoridad y obediencia a la misma. Asimismo, hace referencia al estudio de la sumisión ciega a dirigentes fuertes y antidemocráticos.
La investigación de Theodor Adorno sobre la personalidad autoritaria es la tesis más completa de las razones psicológicas de adhesión al fascismo7. El patrón autoritario combina ideas de una sociedad altamente avanzada, con creencias irracionales. Éste prototipo de hombre se caracteriza por ser iluminado, supersticioso, orgulloso de su individualismo, constantemente temeroso de no ser como los demás, celoso de su independencia y proclive a someterse ciegamente al poder y a la autoridad.
Los psicólogos italianos Michele Roccato y Daniela Converso dicen que el nuevo fascismo capitaliza el malestar general, producto del desmoronamiento social y productivo de la sociedad capitalista8. Esto se traduce en crisis del Estado de Bienestar y en el crecimiento de la marginalidad social. Aunado a la crisis de la democracia representativa.
La conformidad y la obediencia voluntaria por parte de quien está subordinado, son consentidas en las relaciones de poder. Al mismo tiempo, la autoridad real no podría existir sin la necesidad de recurrir a la fuerza, en caso de la transgresión ciudadana a la norma. El autoritarismo se refiere a una desviación. Es una degeneración de la autoridad. La autoridad está al servicio de la persona. Mientras que el autoritarismo se apropia de los otros para utilizarlos en beneficio propio.
El autoritarismo es una autoridad irracional, donde la superioridad tiene la función de someter psicológicamente o materialmente a quien está subordinado. Tal como en la relación patrón-esclavo. Por el contrario la autoridad presenta a la superioridad, con la función de ayudar a la persona sujeta a la autoridad. Por ejemplo, la relación docente-estudiante.
Lo que sucede en los primeros años de vida, tiene repercusiones en su futuro. De esta manera la sumisión a la autoridad, es una expresión de esas primeras experiencias. A la vez el estilo de pensamiento dogmático, que permite comprender a los autoritarios de derecha e izquierda. Al mismo tiempo el autoritarismo de la clase obrera, se debe a condiciones desfavorables de vida. Entretanto, las personas normales pueden ser inducidas a la sumisión de la autoridad.
Es en la adolescencia cuando surgen las tendencias al autoritarismo. Las experiencias directas de vida son determinantes. Los autoritarios no entran en contacto con personas y visiones del mundo distintas, por lo que éste recelo se traduce en sumisión autoritaria.
Según el psicólogo estadounidense Robert Altemeyer, caracterizan el autoritarismo de derecha la sumisión a la autoridad, la agresividad autoritaria y el convencionalismo9. El autoritarismo de derecha es un intento de la burguesía de mantener el poder económico, apoyando a un movimiento de masas que destruya la clase revolucionaria. El autoritarismo de izquierda solo es nominal, pues revela las características de la derecha. Comúnmente un partido político convierte a la burocracia en medio de éxito individual, en las personas más destacadas de su estructura, siendo rara la excepción a la regla. Pero partido político y gobierno deben estar al servicio del pueblo y no al revés.
(Endnotes)
1.La memoria del diablo: Rudolf Höss trazó su auto retrato en “Yo, Comandante de Auschwitz”. En: https://elpais.com/
2.Merton, Robert K. Estructura Burocrática y Personalidad. En: materiales.untrefvirtual.edu.
3.Burocracia. En: https://es.wikipedia.org/wiki/
4.Merton, Robert K. Opus Citatum.
5.Prado, Mario Fernando. Despotismo burocrático. EN: https://www.elpais.com.co/
6.Skinner, Eddy. Nayib Bukele, el despotismo burocrático. En: https://hoy.com.do/Nayib-
7.Roccato, Michele y Converso, Daniela. Cómo y porqué es necesario volver a estudiar el autoritarismo. En: uv.es/garzon/psicología%
8.Skinner, Eddy. Opus Citatum
9.Skinner, Eddy. Op. Cit.
