@arpassv
El dicho popular que mejor describe la hipocresía y la doble moral de muchos funcionarios, dirigentes y ex dirigentes de ARENA es el de “burros hablando de orejas”. Varios hechos recientes confirman la incongruencia entre el discurso y la práctica de connotados personeros del partido oligárquico.
Primero. Este día estaba citado a una audiencia en el Ministerio de Trabajo y Previsión Social el presidente del COENA, Mauricio Interiano, por violaciones a los derechos laborales de empleados que el máximo dirigente arenero habría despedido arbitraria e injustamente.
Esto a pesar de que Interiano y otros personeros de ARENA se pasan criticando el desempleo y rasgándose las vestiduras por los derechos laborales. También durante la pasada campaña electoral el partido opositor prometió duplicar el salario mínimo, pero después saboteó el incremento que hizo el gobierno.
Segundo. El diputado Ernesto Muyshondt propuso que la Asamblea Legislativa penalice las reuniones de dirigentes políticos con miembros de pandillas y que las tipifique como fraude electoral, a pesar de que él mismo se ha reunido con pandilleros con propósitos electorales.
El año pasado, El Faro reveló que el diputado arenero se reunió con pandilleros en vísperas de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de 2014. Según el periódico digital, Muyshondt les propuso una “nueva tregua” si ayudaban a ganar a Norman Quijano, entonces candidato de ARENA.
Tercero. El ex presidente arenero Alfredo Cristiani declaró que es necesario “terminar con la corrupción porque (por eso) hay demasiada pobreza…”, como reacción a un anuncio del congreso estadounidense de “apoyar acciones de lucha contra la corrupción en Centroamérica”.
Cristiani no está libre de culpa, su gobierno cometió uno de los mayores actos de corrupción en la historia del país: la privatización fraudulenta de la banca. Los bancos estatales fueron “saneados” con fondos públicos y después entregados a un grupito de millonarios, entre ellos el propio Cristiani.
Ejemplos sobran. Los personeros de ARENA no tienen solvencia moral para hablar de transparencia, democracia o respeto a la institucionalidad. Recién criticaron el intento del poder judicial de inhabilitar al parlamento en Venezuela, pero ellos aquí hacen cosas parecidas con su Sala de lo Constitucional.
Son, por tanto, “burros hablando de orejas”. Cristiani, Interiano, Muyshondt y compañía.