Los Angeles/AFP
La lluvia y la nieve que desde la semana pasada caen con fuerza en California podrían anunciar el fin del castigo de una sequía histórica, indicaron optimistas las autoridades el jueves, aunque sin bajar la guardia.
«‘Bye bye’ sequía. Cuidado con la puerta al salir», tuiteó el Servicio Meteorológico Nacional en Reno, Nevada (oeste), que también acompaña la evolución del tiempo en el norte de California, el área donde más fuerte han golpeado las tormentas.
Según el sitio US Drought Monitor (Monitor de sequía), el norte del estado está fuera de la condición de sequía por ahora, pero el sur aún se mantiene seco, con el 30% del territorio aún en estado extremo.
«En el sur de California hemos tenido las mayores lluvias de los últimos cinco años y en el norte es la mayor lluvia de los últimos 10 años», explicó a la AFP Tom Fisher, especialista del Servicio Meteorológico Nacional.
«Por ejemplo, Santa Rosa tiene unos 7,5 centímetros de lluvia en este mes y este año registraron casi 30», añadió, asegurando que el escenario se repite en otras regiones.
Pero la situación dista mucho de la de hace un año, cuando prácticamente toda California estaba recuperándose de una severa sequía de cinco años que dejó las reservas de agua vacías, multiplicó los incendios forestales y provocó severas restricciones de agua.
Pronto para cantar victoria
Las autoridades advirtieron, sin embargo, que aunque la naturaleza luce más verde y las reservas comienzan a llenarse, aún falta un largo camino para cantar victoria, ya que la temporada de lluvias termina en abril.
Ted Thomas, un portavoz del departamento de Recursos de Agua del estado, dijo estar «cautelosamente optimista», y advirtió que el impacto de la larga sequía no puede «borrarse de la noche a la mañana».
«Tenemos una larga historia de condiciones cambiantes del tiempo, en las que, por ejemplo, comenzamos con un invierno muy húmedo y lo terminamos muy seco», dijo a la AFP.
«Es un estado muy grande y las condiciones son diferentes en cada área», concluyó.
La oficina del gobernador de California, Jerry Brown, que proclamó un estado de emergencia en 2014, dijo también que era aún muy pronto para declarar la sequía por terminada.
«Es muy temprano en la temporada lluviosa y tenemos experiencias en las que las tormentas ceden», dijo a la AFP Nancy Vogel, vocera de la Agencia de Recursos Naturales de California, en nombre del despacho de Brown.
«El estado de los embalses, la capa de nieve y los niveles de agua subterránea al final de la temporada de lluvias será parte de la evaluación de la declaración de emergencia de sequía a nivel estatal del gobernador», señaló.
Mientras tanto, meteorólogos dijeron que después de la fuerte lluvia de este jueves, que motivó advertencias de inundaciones y deslizamientos de tierra, el tiempo deberá aclararse hasta el próximo miércoles, cuando se espera que otro sistema de tormenta traiga más lluvias.