Yaneth Estrada
@caricheop
Sara, una mujer de 36 años, llegó con su hijo de 5 años ‘ardiendo’ en calentura y dolor de cuerpo a la clínica del ISSS en la colonia Atlacatl, referida de otra unidad médica por sospechas de dengue. El médico de turno no la quiso atender porque están sin cupo, debido al aumento de casos de emergencia (casos sospechosos de dengue).
Las autoridades de salud confirmaron al menos de 10,000 casos de dengue, y de estos se registran siete fallecidos en las últimas semanas; solo en esta sede médica de San Salvador se atienden cerca de 500 pacientes por este diagnóstico. Al menor se le atendió luego de ciertos “contratiempos” y “discusiones” de la madre para obtener atención médica, como cotizante del ISSS. Según la ministra de Salud Ana Orellana, los casos “van a la baja”, pero no dio cifras oficiales.
Arturo sufrió un accidente en motocicleta un domingo; sin ambulancia fue trasladado de emergencia al Unidad Médica del ISSS en La Libertad por una patrulla de la PNC, pero estaba cerrado, a pesar de que el Ejecutivo recalca en su publicidad que trabajan ‘24/7’. Luego con ayuda de una amigo se movilizó al Hospital General del ISSS en San Salvador, donde quedó sin entrada en el área de Emergencias, porque no había camilla disponible, y con una operación en pausa debido a que todas salas de operaciones estaban ocupadas, con nueve pacientes en espera. “Existe una mora en cirugía y personal de salud insuficiente para cubrir las emergencias hospitalarias”, declaró la funcionaria en una entrevista televisiva.
María sufre de una enfermedad delicada, por lo tanto utiliza pastillas de forma permanente que han ido suministradas por el ISSS en los últimos tres años. Esta semana, de farmacia le llamaron para decirle que “no tienen el medicamento, que estará en una lista de espera”. Esto a pesar de que el presidente de la República Nayib Bukele anunció en junio pasado, la llegada de miles de dólares en medicina donada ($47 millones, más $5 millones adicionales y un refuerzo presupuestario aún en espera de $10.2 millones).
El domingo recién pasado, sin embargo, el MINSAL con apoyo del MOP, el Ministerio de Defensa y la PNC llegaron a varios hospitales con medicamentos; “para suplir esta necesidad tan sentida de la población”, según dijo Orellana.
Morena Murillo del Foro Nacional de Salud enfatizó que “existe poca claridad en los temas de salud”, y destacó que “las autoridades deben atender el desabastecimiento de medicamentos que aún persiste, lo que afecta a personas con enfermedades crónicas”. Asimismo, consideraron contradictorio que se “anuncie la apertura de nuevas plazas, pero se esta reduciendo al personal en los ECOS familiares”.
“Ya se esta hablando que van a cerrar ECOS en el distrito 6 en La Libertad, y esto para nosotros constituye otra contradicción, si se esta hablando de fortalecer la prevención de enfermedades; no digamos la importancia que tiene la promoción fundamental de la salud, que debería ser el eje fundamental de trabajo”, expresó Margarita Posada, parte del Foro, quien al consultarle sobre una posible privatización de la salud fue enfática en afirmar que “es posible” .
Cambios de contratos
El 28 de agosto pasado, el Ejecutivo anunció el lanzamiento del Plan Nacional de Salud, confirmando la ampliación en el servicios los fines de semana con consultas generales desde las 8:00 de la mañana; para esto se pusieron a disposición 90,000 plazas. Sin embargo, de acuerdo a documentos oficiales estas plazas son “de tipo flexible”, con pago mensual de $300 (licenciados en química y farmacia) y solo se llamarán a los contratados por servicios profesionales, sin pago de prestaciones (ni AFP, ni seguro social).
En este sentido, la ministra de Salud aseguró: “en las próximas semanas se prevé contratar a mil profesionales de la salud, entre especialistas, personal de enfermería y asistentes, para atender pacientes los fines de semana en diferentes establecimientos”.
Pero para realizar estas nuevas contrataciones, una jefa al interior del ISSS denunció que “ya iniciaron algunos despidos de empleados de la salud con alguna excusa, luego se rumora harán contrataciones con sueldos menores, y sin ninguna prestación. “Esto se llama el inicio de la privatización”, enfatizó la doctora.
Igualmente fuentes cercanas señalaron, que para diciembre de este año se estarían realizando numerosos despidos por parte del Ejecutivo.