Iván Escobar
Colaborador
@DiarioCoLatino
Los Caminantes Guadalupanos Salvadoreños salieron esta madrugada de lunes desde el municipio de Metapán, en Santa Ana, con rumbo a Esquipulas, Guatemala, como parte de la tradicional peregrinación de enero. Cabe recordar que esta es la 53 caminata que se celebra.
Los peregrinos provenientes en su mayoría de El Salvador y Guatemala, así como otros países vecinos comenzaron a concentrar en el parque central de Metapán desde la noche del domingo, confirmaron algunos de los organizadores.
Sofía Rodríguez Padilla y Guadalupe Solano de la delegación salvadoreña compartieron que ya está listo todo desde este fin de semana comenzaron con los preparativos para recibir a los peregrinos en El Covertizo, espacio fundado por los salvadoreños y guatemaltecos en Esquipulas, y en cual se venera a la Virgen de Guadalupe. La visita se da en el marco de las fiestas en honor al Cristo Negro de Esquipulas, que se conmemora cada 15 de enero.
Desde hace 53 años los Caminantes mantienen esta tradición de peregrinar a pie desde El Salvador, específicamente el municipio de Metapán hasta Esquipulas, en Guatemala, van a pie y con sacrificio “se participa con el objetivo de fomentar lazos religiosos en los países y feligreses”, destacó Sofia Rodríguez.
“Nuestro propósito es no olvidarnos y aumentar el fervor religioso, la espiritualidad, la devoción a nuestra madre santísima en cada uno de los peregrinos”, añadió.
El recorrido de la peregrinación que partió desde tempranas horas de este lunes 9 de enero, hacia Esquipulas, salió de Metapán y pasando la frontera de Angüiatú, donde hace un breve descanso la caravana para incorporarse y seguir su peregrinar en tierras guatemaltecas. Por la tarde son recibidos en el poblado donde se venera al Cristo Negro, específicamente en el Mirador y desde ahí bajan hasta la Basílica del Cristo Negro para asistir a la misa, y luego en El Covertizo llegan como cada año para agradecer favores recibidos.
“Es una peregrinación a pie y de intensiones múltiples”, aseguraron los participantes que están emocionados y contentos de mantener y preservar esta tradición que ya tiene más de 50 años, uno de los fundadores de la misma es Luis Guillermo Solano, conocido como “Piocha”, recordó su hija quien sigue la tradición y devoción a la guadalupana, y al Cristo Negro, inculcada por su padre quien falleció en 2018.
Las autoridades locales y turísticas de Guatemala, así como religiosos y la comunidad son parte activa de la organización y desarrollo de la jornada.