Prensa Latina / RT / AFP
El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, recibió el viernes al ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, para afianzar los nexos entre los dos países en diversas áreas.
En la Casa Amarilla, sede la cancillería venezolana, los dos titulares disfrutaron una presentación de danzas tradicionales de este país suramericano.
Las altas autoridades diplomáticas revisaron la agenda de cooperación bilateral y los proyectos conjuntos para el beneficio de los pueblos ruso y venezolano.
Ambos países profundizan la cooperación energética, la minería, el transporte, la medicina, la farmacéutica y la colaboración técnico-militar.
«Cansados de la confrontación»
El canciller ha señalado que, gracias a la mesa de diálogo entre el Gobierno y la oposición, ya se han acordado una serie de decisiones prácticas sobre las formas para regresar a la vía constitucional y «superar la división».
«Todo esto, sin duda, despierta una gran simpatía entre los venezolanos, que están cansados de la confrontación, de las llamadas a las protestas callejeras y a una intervención extranjera», enfatizó Lavrov.
Asimismo, Lavrov llamó a la oposición radical venezolana a participar en las elecciones a la Asamblea Nacional de 2020, subrayando que, en su opinión, «es la única oportunidad» para que «no se priven del futuro en la vida política» del país.
Por otro lado, el ministro ruso condenó las sanciones unilaterales estadounidenses, y calificó de «indignante» el hecho de que afecten a «proyectos sociales y humanitarios» en Venezuela.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia llegó el viernes en Venezuela para entrevistarse con el presidente del país, Nicolás Maduro; la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, y el canciller, Jorge Arreaza.
Rusia y Venezuela celebran este año el aniversario 75 de sus relaciones diplomáticas, que se cumple el próximo 3 de marzo.
Lavrov, condenó el viernes en Caracas las sanciones económicas de Estados Unidos contra Venezuela y las presiones del gobierno de Donald Trump para sacar del poder por la fuerza al presidente socialista Nicolás Maduro.
«Los escenarios de cambio de poder por la fuerza en Venezuela son absolutamente inaceptables», advirtió Lavrov, en Caracas, donde se reunió con la Mesa de Diálogo Nacional.
La crisis en Venezuela «surge de los intentos de lanzar una campaña a gran escala con el objetivo declarado de derrocar al Gobierno legítimo», utilizando para ello todas las opciones, «incluido el uso de la fuerza», denunció el diplomático, recalcando que Moscú buscará que estos escenarios «sean condenadas por la comunidad internacional».
«Estas restricciones son ilegales y constituyen la principal razón del receso de la economía de Venezuela», dijo Lavrov.
Rusia es uno de los principales aliados de Maduro, sometido a una batería de sanciones de Washington que incluyen un embargo petrolero desde abril de 2019 y el bloqueo financiero.
Moscú es además el segundo acreedor de Venezuela, después de China, con unos 7.500 millones de dólares, según una estimaciones de la consultora local Ecoanalítica.
Para Lavrov, el objetivo de las sanciones es generar un «levantamiento» popular contra Maduro.
El bloqueo de transferencias bancarias «afectó tratamientos de cáncer. Nuestra tarea principal (…) es prestar atención a esos problemas y nuestro enfoque es que cualquier crisis puede ser solucionada a través de medidas políticas y diplomáticas, del diálogo», añadió el diplomático ruso, según la traducción de una intérprete.
«Consideramos inaceptables las sanciones e intentos del uso extraterritorial de legislación nacional», afirmó Lavrov, al participar en una mesa de diálogo que impulsan el gobierno y un sector de la oposición.
El canciller ruso también rechazó la presión estadounidense para sacar por la fuerza a Maduro.
«Considero que este escenario es inaceptable y vamos a ser responsables y la comunidad internacional condenará. Vamos a trabajar sobre este asunto en el Consejo de Seguridad» de la ONU, sostuvo Lavrov.
Situación de Venezuela
Esta semana, la portavoz rusa, María Zajárova, afirmó en rueda de prensa que en esta visita se intercambiarían «puntos de vista sobre la situación de Venezuela, las perspectivas de una solución política sobre desacuerdos internos con base en un diálogo nacional, en línea con la Constitución y sin intervenciones externas destructivas o militares».
Igualmente explicó que Lavrov desea coordinar con Maduro la cooperación en la arena internacional, especialmente en lo que se refiere a la lucha contra «las sanciones unilaterales ilegales que socavan la situación socioeconómica en Venezuela».
La visita de Lavrov a Venezuela forma parte de una gira por América Latina, que incluyó una primera escala en Cuba, desde donde viajó a México y finalmente a Caracas.