Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
La comisionada presidencial de operaciones del gabinete de Gobierno, Carolina Recinos informó este martes que el Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador emitió los boletos para que la familia de Victoria Esperanza Salazar Arriaza viaje al país mexicano y pueda tener su cadáver.
Según detalló el presidente de la República Nayib Bukele y la ministra de Relaciones Exteriores, Alexandra Hill Tinoco, brindarían todo el apoyo necesario para las familias y sobre todo para sus hijas que quedaron en la orfandad.
Victoria Salazar salió de Sonsonate en el 2009. Sus hijas se encuentran por el momento en México, y será Cancillería salvadoreña y mexicana las que dispongan los protocolos para ser entregadas a su familia.
La salvadoreña en Quintana Roo fue asesinada por supuestamente alterar el orden público, sin embargo, no se tiene claro aún el motivo de ese “alteramiento del orden público”, lo que si está claro es que tres hombres y una mujer policías contribuyeran para que sus últimos respiros fueran los más dolorosos de su vida.
Tanto México como en El Salvador diversas mujeres organizadas han exigido justicia para la salvadoreña, tal es el caso de María José Cornejo, quien de igual forma tiene familiares que han inmigrado en busca de mejores oportunidades tal como lo hizo Victoria.
“Sabemos que esta crisis migratoria es la evidencia del fracaso de las políticas públicas, de gobiernos y un sistema hetero-patriarcal que nos violenta y que nos obliga a migrar”, señaló Cornejo.
María Cornejo denunció de igual forma que hubo una masacre en Tamaulipas hace un tiempo, donde murieron diez salvadoreños migrantes y el Estado salvadoreño se quedó en silencio.
Por tanto, instó a las autoridades competentes que no genere un discurso “asistencialista”, sino que genere las verdaderas políticas públicas para que la situación de la migración se resuelva.
Las organizaciones de mujeres y de pro migrantes han manifestado que toda la crisis migratoria, es el resultado de la “militarización” de las fronteras y de las políticas que se están extendiendo desde los Estados Unidos que criminalizan el acto de la migración.
Tal como se hizo con el brutal asesinato de Victoria Salazar.
A los policías de Tulum en Quintana Roo no les bastó haberla lanzado al suelo y ver a una mujer indefensa, sino que, uno de ellos, decidió ponerle la rodilla en la nuca hasta fracturarle la primera y segunda vértebra, según los resultados de la necropsia practicada por autoridades forenses mexicanas a la víctima.
Las mujeres organizadas pidieron al Gobierno salvadoreño que este caso no sea utilizado como una cortina de humo o para ocultar otros tipos de temas, sino más bien, que sea un caso que conlleve a tomar decisiones y acciones necesarias de protección para todos los migrantes desde El Salvador. “Queremos que todos los casos sean visibilizados y que este tema no se vuelva un utilitarismo”, finalizó Krissia Aquino, de la Asociación de Mujeres Ixchel.