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La Paz / AFP
Representantes de ocho candidatos a la presidencia de Bolivia avalaron el lunes la decisión del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de aplazar indefinidamente las elecciones generales, previstas inicialmente para mayo, a causa de la emergencia por el nuevo coronavirus, informó el presidente de ese órgano, Salvador Romero.
«Todas las candidaturas han expresado su respaldo al posicionamiento que ha asumido el Tribunal Supremo Electoral, indicando que se suspendía el proceso electoral en este tiempo de cuarentena», sostuvo Romero en rueda de prensa.
Con representantes de todas las candidaturas «hemos encontrado un espacio de diálogo, de apertura para encontrar acuerdos para ir generando consensos que requiere el país en este momento», agregó.
Aún no ha sido acordada una nueva fecha para los comicios.
En Bolivia, con 19 casos de coronavirus, rige desde el domingo una cuarentena total de 14 días, con cierre de fronteras, confinamiento de toda la población en sus hogares y limitaciones de transporte.
Las elecciones del 3 de mayo habían sido convocadas de forma extraordinaria por el gobierno transitorio de Jeanine Áñez, quien asumió el poder tras la renuncia de Evo Morales (2006-2019) en medio de las revueltas sociales que siguieron a los comicios del 20 de octubre. Esa votación fue anulada luego de que una auditoría de la OEA denunciara irregularidades a favor de Morales, que se postulaba a un cuarto mandato.
Tras anunciar el sábado el diferimiento de la votación, Romero aguardaba propiciar un «diálogo amplio y plural con todas las organizaciones políticas participantes en el proceso», con el fin de definir «una nueva fecha para la jornada de votación de la elección general de 2020».
Según anticipó el jefe del ente electoral, las próximas reuniones «para buscar definiciones de manera concertada sobre el proceso electoral» se realizarán de modo virtual, debido a la cuarentena total hasta el 4 de abril por el coronavirus.
Aunque no se ha definido aún la nueva fecha de las elecciones, «estamos conscientes de la necesidad de generar certezas al país» y existen «acuerdos para seguir dialogando», sostuvo Romero.
Según un sondeo de mediados de marzo de la encuestadora Ciesmori, el candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS), Luis Arce, delfín político del expresidente Evo Morales, encabeza con un 33,3% la intención de voto, seguido de lejos por el expresidente centrista Carlos Mesa con 18,3% y la propia Áñez con el 16,9%.
