Las Vegas/EEUU/dpa
El boxeador mexicano Saúl “Canelo” Álvarez venció con facilidad y por decisión unánime a su compatriota Julio César Chávez Jr. y anunció que enfrentará al kazajo Gennady Golovkin en septiembre próximo.
Golovkin, campeón del mundo en peso medio, subió al cuadrilátero una vez que la pelea entre Chávez Jr. y Álvarez terminara para anunciar junto a éste último su próximo enfrentamiento, el más esperado en dicha categoría.
“Tú eres el siguiente, mi amigo”, le dijo Álvarez a Golovkin. “Es el reto más grande que me espera, he peleado desde los 15 años y yo no le tengo miedo a nadie, cuando yo nací el miedo ya se había repartido”, expresó el mexicano.
“La era del ‘Canelo’ es la mejor porque peleo ante los mejores”, aseveró Álvarez, ante los cuestionamientos de que había rehuido una pelea ante uno de los mejores boxeadores de su división.
El combate fue acordado para el 16 de septiembre, fecha en que se conmemora la Independencia de México. “Buena suerte”, le deseó Golovkin a Álvarez. “La suerte es para mediocres”, contestó su futuro contrincante.
En la esperada pelea para decidir al mejor púgil mexicano de su generación, la victoria de Álvarez sobre Chávez Jr. fue indudable. Los tres jueces le dieron la victoria por 120-108 y en ningún momento su triunfo peligró en el cuadrilátero.
Ya desde los primeros rounds el nacido en Guadalajara, México, fue muy superior. El “Canelo” Álvarez, de 26 años, hizo sangrar de la nariz a su contrincante a partir del tercer round.
Entre el sexto y el séptimo, el ojo izquierdo de Chávez Jr. mostraba una inflamación que le impedía ver con claridad.
Los últimos dos episodios, el undécimo y el duodécimo, según lo acordado, sobraron.
A pesar que en la esquina de Chávez Jr. le pidieron que “quemara las naves” en el décimo round, no hubo respuesta.
Los abucheos del público fueron para “El Hijo de la Leyenda”, que no presentó ninguna estrategia para salir airoso de Las Vegas, ante un lleno de unas 20.500 personas.
Los castigos de Álvarez, por el contrario, fueron de todo tipo. La única cualidad que resaltó de Chávez Jr. fue su capacidad para absorberlos. Sus contraataques, lentos y poco efectivos, se fueron quedando cada vez más cortos conforme el combate avanzó.
“Sé que no hay pretextos, pero no sentí la fortaleza de otras peleas, el peso me afectó”, declaró Chávez Jr. en la conferencia de prensa posterior al combate. “Hice lo que pude, pero mi cuerpo no respondió”, añadió.
“Voy a seguir trabajando con Don Nacho (Beristáin), pero me voy a quedar en 168 libras (76,2 kilogramos), es lo mejor para mí y para mi cuerpo”, aseguró Chávez. La pelea había sido acordada en 164,5 libras.
“El ‘Canelo’ ganó bien, es un buen peleador, espero que la gente lo siga, le echa muchas ganas y es muy dedicado. Le pido disculpas a la gente, sé que esperaban una guerra”, finalizó, con ambos ojos prácticamente cerrados de la hinchazón por los golpes recibidos.
La larga rivalidad entre ambos boxeadores mexicanos quedó enterrada una vez que su combate terminó. El choque de guantes en el inicio del décimo segundo y último round fue de respeto mutuo. Ambos equipos se saludaron y congratularon entre sí al término del combate.
“Yo pensé que (Chávez Jr.) iba a salir a intercambiar golpes, pero no sucedió así, yo también quería una mejor pelea, pero no se dio”, puntualizó Álvarez. “Tengo a la mejor esquina del mundo, cerramos este capítulo con un broche de oro”, afirmó Álvarez en su conferencia.
“Me voy satisfecho, disfruté la pelea, espero que la gente vea que puedo con esto y mucho más”, manifestó.
El público, que lo había recibido con algunos abucheos, acabó entregado a Álvarez.
El ganador de la noche también dijo que su pelea ante Chávez Jr. fue “una de las satisfacciones más grandes” de su carrera. “Gracias a dios he tenido muchas, he estado en grandes eventos, pero se vienen muchos más”, declaró.
Sobre su pelea contra Golovkin, el mexicano dijo sentirse “emocionado”. “Septiembre es una gran fecha para todo México, yo voy pelea a pelea, cuando llegue el momento, estaré mejor preparado que ahora”, agregó.