Alma Vilches
@AlmaCoLatino
El presidente del Banco Central de Reserva (BCR), Douglas Rodríguez, indicó que este 2 de mayo inició el “Censo de Población y Vivienda El Salvador 2024”, con el objetivo de conocer cuántos salvadoreños habitan en el territorio, también permitirá saber cómo viven y cuáles son las principales necesidades de la población.
“Serán dos censos en uno, el de población que nos dirá cuántos somos y donde estamos; y el de vivienda que nos dirá dónde y cómo vivimos. No se harán preguntas de cuánto gana, cuantos trabajan, ningún tema económico”, explicó.
Asimismo, enfatizó que en el censo se preguntará cuántos viven en casa, con cuántos cuartos cuentan, materiales de construcción de la vivienda, si un familiar ha fallecido en los últimos meses, si hay embarazadas en la vivienda, entre otros. La información se recogerá a través de dispositivos móviles, ya que el censo será 100% digital.
Para este censo, el BCR desplegará más de 10,000 censistas y supervisores de brigada en todo el país, quienes han sido capacitados para esa labor y llegar a los hogares salvadoreños debidamente identificados con camisa, gorra, mochila y carné, el cual tendrá un código QR que puede ser escaneado para corroborar que esa persona es realmente un colaborador del BCR.
Rodríguez enfatizó que toda la información compartida por los salvadoreños es confidencial y está protegida por el artículo 25 de la Ley Especial de Estadística y Censos. Este censo de población y vivienda también llegará a centros penales, hospitales, albergues, lugares de resguardo y población indígena.
“Luego de haber finalizado con éxito el pre-censo o actualización cartográfica en 2023, inicia el censo, por medio del cual tendremos datos exactos sobre cuántos residimos en El Salvador, cómo nos distribuimos cuáles son las condiciones de nuestra vivienda; por cada boleta el censista se tardará alrededor de 45 minutos”, sostuvo.
Según el funcionario, los datos del país están desfasados, en 17 años no se ha tenido una cifra exacta de los habitantes y su condición de vida, cuando la norma internacional indica que se debe hacer por lo menos cada 10 años; con este censo, se pretende llevar a cabo el desarrollo económico y social de los salvadoreños.
A la vez, recalcó que este censo generará empleos directos y consecuentemente se mejorará la economía local, pues las familias de estas personas tendrán mejores ingresos.